lLIA K A N
EL ARTE DE LA DEFENSA
EDICIONES MARTINEZ ROCA BARCELONA
EL ARTE D E LA DEFENSA I . Kan
Traduceion directa del ruso
Revisi6n técnica por ]as8 JUSTE BORRELL
INDICE
PRIMERA PARTE L A DEFENSA @ 1972
EDICIONES MARTINEZ ROCA
Av. Sosé Antonio,
RESERVADOS
TODOS
774 7,' - Bardona.13
LOS
DERECHOS
Este libro no puede ser reproducido en todo, ni en parte, en forma alguna, sin permisa
Def~nsa de la posici6n del rey . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Todo debilitamiento de la defensa de peones del rey entrafia peligro Defensa dc la posiciún de enroque con piezas . . . . . . . . , . . . . . . , . . p:fensa de los puntos poco sólidos no relacionados directamente con la posicihn del rcy . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . La defensa activa y pasiva . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
SEGUNDA PARTE EjEMPLOS XrJSTRUCTlVOS DE DEFENSA
La defensa activa, el contraataque . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . DcpSsito Legal : B. 2 7 9 8 - 1978 ISBN 84-270-Mis-9
Grificas Diamante, Zarnora, 83, Barcelona - 5
Simplificación dei juego y paco a la fase final . . . . . . . . . . . . . . . . . . El sacriticio cama medio de defensa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Procedimientos tácticas de defensa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . La actividad forzada del rey . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Varios cjempios de defensa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
El ataque, ia ofensiva g los mwimimtos activos constitugm el medio fundamental para lograr la victoria en la prdda de ajedrez. Pero puede suceder que un c u a r d i d o plan de d~fertsullevado a efecto con todas las par*
ticularidades estratégicas y los rndltiples procedimientos tdchbs recItace el ataque y asegure la victoria. E1 restdtudo de un empate ta?~nbihmeie ser de medidas d e f m ' v a s llevadas felizmente a r&rmiao.La m o r p t e el de ajedrecistas prefieren la ofenstenstoa, pues el pupel de defmwor es cm frecumcia difin7 y desagradable. Con todo, In defensa es un importmttiismo factor de lucha en el ajedrez y no se debe menoqreciar. 81 ajedrecisfa consumado manifiesta PI mmonioso desamito de su tulento en el terreno ofmsivo y defensivo. Los grandes maestros de la defensa h& sido el pripnw cmnpe0, de! mundo, Steinitz, y su oponen& el destacado ujedrecista niso Chggorán. Y bs sucesores de ellos, Lasker, CupabIma, Alekftine, Eeiwe, Batvinnik, Stngslov, TahL y Petrcsian, han dado muestras del mte de la defensa en su trrewaMdn deporhhva, Toda aquel que Ea desconozca puede cmsidwarse un jugador incmplero; por b mismo, el uficlonado debe apumdm a defenderse tenazmente y a hallar ventajas tácticas en loda posicirhi dificil si quiere llegar a ser maestro en esfs juego a, por lo mas, alcanzar una categoría superior en di. El bando ~ o n s d oa defenderse está sometido hasta ciwfo purato a Im planes del contrario, circunstancia que ha de evitarse empleando todos los medios posibleses,Por ejetnpb, si el oponente se #+m a Sftncm Zq posicidn de1 rey, hay que tomm las m e d i d ~ soportunas para reforzada a su debido tiempo; evitar si desmotonamimto de1 grupo de peones que la deficnden, y movilizar iaE papaezus necesm'us para sostener la defensa, Si la accibn del adversario va dirigdu contra los punlos mal defendidos del flmtco de dama, igtraimmte se deben t m a r las medidas defmiutis que el caso requiera. Un ptun defetesivo ideal es megurar la invulnerabilidad de los puntas que son 81 objeeO de adwue del contrmb; r~chrrzareste ataque, tomar la inindliva. En ello tos esfuerzos del defensor se ven coronados con lo vicí d .
Otra pion atraymttt. por SU oara'aEndnes contraatacar en el flanco opuesta opanmife ha elegido pma iniciar ia ofmm'yo, pues esto *de ser suficiente para newtralizm las o p m - w e s o f m b g obligarle a retweder. F X q j también otros medios defensivos m k niteresanres que ia defensa pa-
al que d
siva ,a prolongada, aunque, a veces, ésta as el Gnico medio 'ora evitar In derrota; cuando sucede af,no deba cundir el desdnnlno, poaus la infinidad de movirntentos que se suceden h p r e brindan aria opartunidad para MIir de toda situacidn embarmosa. Por ziltinto, puede ocurrir que la ylasrt'dn de uno de los dos bandos se haya complicado mucho, entonces Ia inventiva tktica es el ofitico procedimiento pora hacer cambiar et idga'co resultado de los acontecimz'írntos. Los mm'mientos defeasiuos en e l medio jwgo kan de &ectuarse sin perder de vista un posible paso a fa fase final de la partida, cuya efectiva valoracidra es un factur importante en el rechazamiento del otague c z r d o @!ID mtrmia esfumzo y sncrificio ,materiat. La dejetzsa ha de ser tenaz: a t o no significa que e1 njedrf&st~, puesto en una situacidn dificil y desesp~anzadorainsista en grosegutr cI juego, lo cual muchos principiantes suelen hacer. Esto debe calificarse de falta de respeto al aponente. Lo que nos proponesnos en este modesto libro no es eso, sino limar a termino una defensa racianal hasta donde las posibilidades tuctica~y estratégicas lo permitan. Los procedimi~niosy aspectos defensivos son muv variadas en el medio juego; por ella, estimado lector, intentaremos conjuntmenk annlizar Los problemas de la defensa en la medida que sea posible para prestar ayuda al crecimiento mtistico de los numerosos aficionados al ajedrez e indicmles el recto camino que lleva d estudio de uno de los mBtodos importantes en la contienda deporfivu del ajedrez.
PRIMERA PARTE
LA DEFENSA DEFENSA DE LA POSXCION DEL REY
El objetivo de la partida de ajedxex Morpity-Unos ~ n s u l t a n t e s es: dar atate al rev. B ataque cantr~i Paris, 1859 esta pieza es una cautivadora fama de U P ~ activamente, F y su defensa Diugrrmaa neim. 1 decidc a menudo el resultado de la contienda. En la agereura, lo primero que ha de hacerse es procurade un sitio seguro, o sea, enrocar a uno u otro lado del tablero; esto no se hace s61o para aescondera al rey, sino tambibn para facilitar la evolución de las torres; pero, al elegir el sitio, se ha de tener en cuenta las garantias de seguridad que puede ahecer. Desde el punta de vista de la defensa del rey,,-10 mas importante es enrom a su debido tiempo, En la pxActicíi a veces ocurre que el rey permanece mucho tiempo en su pasiciSn inicial, porque 10s das contendientw no tienen necesidad de efecLas blancas sacrificaron una pieza tuar el enroque. Pero estos casos no y llevaran a efecto un poderoso arasuelen dame con frecuencia que. Las negras no pudieron enrocar, y sus fuerzas estdn muy mal situadas. Estas circunstancias facilitan a las * ~ . , J @ r a a & 4% - p w & . - w Mancas coronar rapidamente y efiwEI ataque cazmente la Incha: contra el rey es ya posible en Xa primera fase de la partida; en eHa, se 13. T X C I TXT brindan muchas oportunidades pa14. TID D3R ra atacarla, mediante operaciones 15, A X T + CXA combinatorias, y su defensa es dificil 16 DSC+I cxa en extremo. 17, TBQ mate
-*
.
.- -
AIekhlne-Kiisamaxi Nueva York, 1924
Diagrama núm. 3
-
Diagrama n h . 4
Diagrama ntirn. 2
27. T X P
si
bs
fuerzas estdn equiiibradas, y, blancas retirasen el caballo de
la casilh 5A8, Ias negras afectuarian el enroque corto después del movimiento A2R. Pero la posicidn del rey negro es propicia para un BC¿We combinatorio, que Atekhinc realid brillan temente:
Es la iinica respuesta; s i l. ..., D x D, entonces 2. CBA y mate. 2. TRXB!
ASC
D4B
Aceptar el sacrificio de Isi torre supone perder rApidamente la da despn&s de 28. ~ x p ~ + ,
28. T x A .+-1
...
&te movimiento impide a las gras t o m r la iniciativa.
28. ... 29. D4T+
RXT R2A
30. C6D+ 31. D7R+ 32. 'BR
R2C B3T
ne-
Y las negras abandonaron.
Amenazaban mate cun 3. C6A o CR6D.
3. C6A 4-
R1A
4.
TXC
cxc-t-
5. DSR!
Y las negras se rindieron.
(Ver diagrama nfim. 3)
Las negras han demorado el enroun ataque arrollador: que y están sometidas a
(Ver diagrama núm. 4)
Las fuerzas están equilibradas; pe. ro ias blancas tienen una enorme superioridad en la dispociciún de sus piezas. El rey negro ocupa una posición dcsdichadisima. La partida prosigui6 asi:
El ataque de las blanca no disminuye desg~bsdel cambio de damas. Ahora amenaza 22. CXP. 21.
...
22. A3R 23. TXTxP 29. W C 25. C5A
T1A CJC
C4R A4A
Q-0
Y las negras se rindieron. Ea Xa. apertura se decide I;or lo general a grrb fado se va a realizar el enroque; pero muchas veces hay que hacerlo cuando se IXega al medio juego y, comitnmentc, se apta por el corto. Tambien & ~ j e h bd e &k Amn@&n& .que -prufimn- eL
-
-
-
Veamos una breve aartida en aue las blancas no csrim;t
1. P4R 2. P4D 3, C3AD
MAD
4. C X P 5. CXC-16. C3A
CJAR PC x C
7. P3AD
P3R
P4D
PXP ASC
Ia detnsidn de 1 s negras es oportuna por cuanto su aosicibn de Reones rñ el flanco de1 fey cst& desbaratada. Las %ancas habrlan tenido que contar con 1a vertical abierta de su adversario, caso de bnrocar corto. Sin embarga, merece ateacicin el contundente juego despuks de X I . 0-0 y Ios consiguientes movimientos afensivos P4TD, P4Cü y así sucesivamente. La gartida finalizii de esta manera:
+te grave error es la ninsecucncia de haber subestimado los peligros que entrafia el enroque larga. Las negras dan mate en das jugadas:
...
14. 15, P X D
DXPA-f.! A6T, mate
U de notar que esta partida ta #bje~~...~h-a&~~,,pddqt jugaron doc maestros. amtrario dfl~ded ~ de hd-, ~ m He aqui o t ~ oejempIo instructivo Tal elección depende de % posición de una partida Felderhof-Euwe, La y &.sus particularidades. Haya, IY33: &a-@*Sobre ella escribe el ex cam1, PQR P3AD pa6n del mundo M. Euwe en uno 2. P4D P4D de sus artículos: u& muy importan3. C3AD PXP t e no olvidar que, decpuh de ha& 4. C X P A4A se efectuada el enraque Iargo, e1 rey 4. D3A P3R ocupa la miIh IAD y a t o dificulta 6, M R D4T + su dcbcrisa. Par dlo, se aconseja a 7. A2D D4D 108 principiantes el c0rto.n S. Asa8 D x PD OW.
Las negras han paado un ~ 6 n ; rocado corto. La parada prosigui6 pero las blancas p d a n haber con- asi: tinuado audazmente 9. C2R y, si 9, ..., DXPC, 10. O-Q; de este modo, 9. ... G2D ' ,M. C2R AXC mpensaban la pérdida de las dm 11. A X A D5A peanes con h evofuci6n de e s pie12. A3A CRJA zas. MAS hicieron el movimiento. 13, T4D DXP 14. AXPA PXA 15. D x P TlCD l6. TRfD A6T! Tras lo cual las negras mantuvieron das geona de ventaja y atacaron A 17. P x A sucede 17. ..., M, y a1 rey, el cual habrfa estado bien dt- las blancas sufren notaMe menasfendido si las blancas hubiaen en- cabo,
I t
II
j
I
/ (
TODO DEBULITAMIENTO DE LA DEFENSA DE PEONES DEL REY ENTRARA PELIGRO
Los peones son un hbor impartante en ia defensa de esta pieza, particularmente los que ocupan posiciones inmediatas a ella despub dci enroque, bien a un lado o al otro. Al. analizar los siguientes ejemplos esquemáticos, el ajedrecista debe tener presente que en la practica se procede dc acuerdo con las necesidades de Xa situacihn dada. Tomar toda regla general y q u e m a por axioma es nocivo a su desarrollo artistica y a sus Gxitos en este juego. Estas reglas generales d e k n aplicarse en caso de que se den determinadas condiciones. Diagrama núm. 9
La prActica ha demostrado que la los peones puede potencialmente evitar todo esponrbtiea aceramiento de las piezas del adversario a Ias casilias PZR, P 2 M . P2CR y PLTR. El atacante ha de contar con que sus piezas y peones situados delante de ellas pueden ser tomados por Xas negras, y a menudo se ve en Ia necesidad de sacrificar a la vez una pieza y un pe6n en uno de los escaques de 1a sexta horhncal el ataque Con todo, este sncrificio no siempre queda suficientemente justificado, por lo que una defcnsa tenaz se corona con el Bxita, Otra afma del atacante es abrir brecha en e l grupo de peones, aunque tambikn resulta difícil de realizar debido a la estructura inicial del bloque defensivo. Uno de las retativos defectos de este grupo es, a veces, la inmediata amenaza de mate por parte de las piezas del adversario en la horizontal octava (primera). No obstante, este peligro puede, en ocasiones, no ser real. Si bien w.&as partidas ea~&d~%cism,J.dtos de exwriwch &*owir .que 10s ? o p ~ n @ ~ W su-my a p o .~& . a m aun, pw@i&en7 yi*.de i i u e w wm posicí6n inicial de
IX&T~U-
la &cthikd & ImL,bame%& pwnas ain. niagln wh 4 1 ~ . k . o b l i g u ea E&. Guw& suwde s i , h posicibo to-.este a p e a :
,,
II
I Diagrama nUm. 6
Dirrgrama núm. 7
1
'
4
I
i
-
*
---
Aquf el debilitamiento también puede faciXitax la ofensiva de peones. Y la abierta diagonal ICR-7TD amenaza peligro al rey; por olla pueden
actuar la dama y el alfil de las Maricas. U.=caque 3R es el abeto del asalto de las piezas del adversnrio. Corniinmente resulta ahn más dificil de defender Xa siguiente mici6n: Diagrama ntim. 9
-
.--.
debilitamiento del grupo de peones a consecuencia de haberse tomado una pieza o un pe6n. Diagrama nlim. IO
í La prsctica del ajedrez y los traba-
en Iaia casillas 3AR, 3CR y 3TR, que son Ias inmediatas al rey, y en las disigunales de escaques negros; esto
debilitamiento de la pposiciSn de enroque, el movimiento P3TR de ias
puede ser aprovechado por el adverpsarrio para dectuar un ataque arrollador, C o n e 1 cambio P5T x P3C o P5A X P3C, las blancas pueden abrir la vertical. &te ddeilitamiento de la posrcibn del ~y es i n a d a M e a menas que L 4 r a n s M w obliguen a dio. -a-,,cirrse p&
jas de strs te4ricoc han demostrada que, entre 10s diveaos aspectos de
I
negras es relativamente admisible; m alrslante lo cual, tiene defectos ~ & d m a t i i e s ~ ~ x ~ria u ek, S e x t a hoa%m%i. Wwal, ,a&. @n.-piaede BE 41 &jeto de ataque; la posibilidad de sacriiiar una pieza por d es con frecuencia un motivo combinatoxio. Por último, es necesaria atender a la circunstancia de que el pe6n 3TR crca las condiciones favarabIm para un asalto de peones por parte dd adversaria; pos ejemplo, con el y .TE, En 'fa casilla wm& l a 4CR,las geanes blancos y negros ioman contacto. g el bando que debilita la posición de su rey con eI movimiento P3TR se somete al peligro que Xkeva dcntro de s i la vertical abierta. Veamos Ia siguiente disposicidn de peones: (Ver diagrama niím. 7)
fasta suele ser el resultado de Irr ~euo~uciún del Afii en el flanco; si &te ampa el escaque 2CR, campenda efectivamente el debilitamienta we Ja jugada P3CR ha ocasionlrdo; s i no, este debilitamiento es seasible
14 t
wetnizadoes el AR,
>lI
Si IB negras no logran compensar
este debilitamiento con una ventaja material, una operaci6n activa en fa vertical abierta, etcetexa, entonces ia
I
i
\ ¡
Diagrama nniin. 8
I !
Aquá el bloque de peones de las esti seriamente debileado por los ahuecosr 3R y 3CR.&.iiam hueca el. acaque'que no puede ser dehndida par los peoneF*; p d i
piezas de1 adversario ios toman al asalta y se s i l b en ellos. Hemos visto una serie de posiciones es~uem6ticasen que la fartalcm del rey se debilita, por el avance de distintos peones hacia ella. Conviene adsrtir qw.ate.bzeve d i &y sus resuitados se fefiaren a los prablemas estratégicos y tácticos del medio juego. &m, en la fase final 6 la partida, culilquiera de esbs movimientus de peones puede ser útil pam activar Ia incexvencibn del rey en. &,sitio en que acontece la lucha. Una vez más, esto nos convence da que, s41o abordando concretamente la posición y valorAndafa debidamente, se pueden apIicar l a ejemplos que acabamos de exponer y Ios que sucesivamente expondremos. Veamos otros ejemplos relativos al
defensa puede ser bastante dificil. Los peones doblados y aislados safi inconvenientes, incluso en la fase fide la partida. b t o conviene no olvidarIo, pues uno de los aspectos de la defensa es e1 paso a dicha fase, mediante el cambio de piezas y peones. Veamos otra posícibn peor que la antecedente: Diagrama núm. I I
15
"
Aquf In mala situacibn aun m& grave debido a Xa abertura de fa importante diagonal 1TR"OTDy al nulo vabr del peBn 3TR en e1 finai de la partida. Indudablemente, no toda ge6o doblado es desventajoso y peligroso para el que se defiende. Ejemplo:
Diagrma n h . 14
-
4
"
.
-
-
Diagrama ruin. 15
i
^.
-
_
.- -
.
-.
,.
Y fas negras se rindieron. D O m U e
i
Diagrama nzím. 1 2
Diagrama n&m. 13
Las fuerzas estin equilibradas; pero Ias negras tienen puntos dkblfes en !as casillas del flanco del rey. En su #Manual del juego de ajedreza, Capablanca e ~ c r i hacerca dc esta posicidn: i I a negras amenazan can dar mate y, al parecer, rendrfan buen juego aún cuando las blancas lograsen defenderse de él. Pero resulta que kstas dan maxe en tres jugadas, de la siguien& manera:
Chigorln-Lebedkv Moscú, 1901
4
Diugruma núm. 16
i 1,
Esta posici6n parece un poco mds compleja que la anterior par su cantidad de material Y disposición de la.. fuerzas, Con toda, g por In deficiencia que ya conocemos en la defensa de las negrs, las biancas deciden la contienda a su favor: 1. C x P l 2. D x l + I
AxC
RXD
3. T5T, m d e (Ver diagrama num, 15)
La deficiente posicibn de
En
esta posición, ef resultado de la contienda no stzi tan claro como parece a primera vista, aunque .las
Estos peones pueden, en ciertos casos, servir de s6fida defensa al rey. Ahora pasemos de Ias esquemas a Ios casos concretos:
F
piezas de las blancas apuntan peligrosamente aX flanco del rev. Pero basr6 con el movimiento 25. CTRC! para que las negras se rindiesen. Pucs el debilitamiento del escaque 3CR trajo consecuencias fatales: a 25. ..., E)x C sucedía 26. Z)XPT+I, R x D; 27. T5T R IC; 28. T8T, mate.
(Ver diagrama nUm. 18)
realizar un ataque rel6mpago:
...
Amenaza mate en una jugada; si
.,
.. T X A; L TBD C 2 h 2, TXCI L.
+, y s i 1, ...,
La barrera defensiva de Izis negras se ha quebrantado por el movimiento P3TR; esta brinda a bs blancas una oportunidad para realizar cl siguiente
ataque combinatorio: 1. CXPC
+,
L C4D 3, CS;A+ t
16
nes en la defensa permitib a Chigorin l. AlRI
I
Baku, 1951
10s peo-
RxC DI A RIC
.
.^--
-*- "-
'
L
,-
.,
Diagrama nnhn. 18
., ,
1. AxP!
PxA P4R
3, CSC! 4. TDIR 5, T X P !
TID
2.
DxP
-
haber iugado 12. .. ., P4Al; de esta manera, habrl'an podido defenderse con grandes posibilidades de Cxito. Sx a 12. ..., P4A, fa biancas hubieran respondido con 13. A x PT, entonces C2D X P, y si a 12. ..., P4A hubiera sucedido 13. P X P a. p., las negras hdbrian jugado 13. . . , C X P .
nz~
Y las negras no tardaron en rendirce, pues no pueden comer la torre, porque 6. A7T+ y se da mate en dos jugadas.
-
t
Rudenko-Bxews Corngcnci6n por telkgrafu. U.R.S.S.-Inglaterra, 1946
Ahues-WEnter Scarhoro, 1930 Diogranza nním. 21
Diagrama nÚm, 20 4. D3C-t5. DXC+
,\
en la teoría del medio juego y realiu d a en la práctica, porque, si las ctrcunstancias s o n favorables a las blancas, decide ragidmentc e1 resul. tado de la contienda. 17. ..
18. CSC+
RXA
83C
19. D3DI.20. D3CR
25, R X A
l
P4A D2R 1'D'LD RZT
!
TXC
AXP+ D4A -i-
F
26, D3R
4
Riumin-Budo MoscU, 1931 Diagrama núm. 19 Aquí se rnas rehtivoc a cdmo defenderse de1 ataque contra la paco &ida posicidn del rey. h partida prosiguiti asi:
¿Que defensa tienen las negras de Ia amenaza que se crerne sobre la po-
sic1611de su rey7
12. ... 13. A X P T ! 14, DXPT 15. T3R
X d P5R
TXR PXA CX A
Tras lo cual estuvieron sometidas a un ataque irrechazable y fueron vencidas. Conviene advertir que a la rtalizacíSn de este ataque contribuyó el innecesario y prematuro movimiento P3TR que debilitb Iít p a i ci6n de enroque. iHuba otro movimiento defensivo mejor que 12. ...,
r
CZD?
~ s movhiento k fa cama de la derrota inevitable. Es cierto que las negras cometieron mucho antes un error. Ahora, 16. ..., A X C;era relativameate mejor.
17. AxP-t-t
...
Ha de tenerse en cuenta ta posibilidad de esta combinaci6n, conocida
ii
Si X L ..., RIC, entonces 19. DST, TIR; 20, DxP-t-, RXT: 21. DST-t-, RlC; 22. X)7T+. RXA: 23. DB'CI-, RZR; 24, D X P , mate.
23. C x T D 24, A5C
Y las negras se rindieron,
1%
.
21. T1D 22. C X P t
C5C
Aqui h posición del peón 3TR también brinda a las blancas una oportunidad para deshacer el dispositivo defensivo det rey negro, sacrifrcando esta vez un alfil:
<
1
Y las negras abandonaron. Recornendmos al fcctor que anatice detenidamente esta cornbinaci6n para convencerse de que la defensa de las negras carece de perspectivas, La curioso en esta partida es que la avictimas fue un maestro, no un af icionddo. De ese modo, si hacemos un m u men de las ejemplos analizados, podemos $legar a la siguiente cmclu.
sibn: 2 1 Todo infundado movimient~de m peSn que defiende al rey ocasiona 1Ferw quebrantamientos y facilita
ai adversa& Ia hickfiSn de1 ataque. 2) Todo cambio desventajosa, reLcionñdo con el doblafe o aislmkilde Eiemes, suel@ser la causa de m =tasw6fico q u e h t a m i m b de la posicidn del rey. 3) Es himporCankrecardar que las w i H a s - n0 d o m i d a s por las peones pueden ser ocupadae por las piezas M-a$vwario; esta tiitima eircunstan* entorpece la defensa y, a vaES,
la hace impasibie.
TIRZ En efecto; el maestro Rnma-
novcki indrc6 que las negras debían
19
Diugra~nan h . 22
Diagruma n h . 23
DEFENSA DE LA POSICION DE ENROQUE; CON PIEZAS
Al trazar el plan defensivo de esta posícibn, el eiedreciñta ha de tener presente el significado de Ls piezas y de fos peones. En los anteriores esquemas y ejemplos la defensa del rey es deficiente debida a 10s defectos de la coIocaciBn de peones causados por descuido o por las cucunstan-
En la organizacibn de la defensa no sólo deben intervenir peones; tarnbien piezas. Pero debe observarsr? rigurosamente el principio de la econoda de medios para ello. Por ningUn concepto deberán acumu'larse piezas innecesarias en el sector de la defensa; ha de procurarse efectuarla con el rnfnimo de medios af objeto de emplear los restantes en una cantraaccibn en otro sector de la contienda. Si la lucha se complica, por har! sido quebrantado el bloque dc peones o porque dstos han sido avanzados, las piezas pueden protegr*r al rey. Mas en el10 no ha de descuidarse la aaci6n mutua de las piezas que defienden g Ptas que
centrar Ia accidn de dos piezas; la amenaza de dicha acciSn será efectiva s i los dm puntos mencionrnda~ están defendidos shln g o r el rw. En la prCictica, LquC piczas deben intervenir en la defensa? El lector ya conoce CI valor de elIas y su equivalencia. La dama es la m i s poderasa; poder que aumenta cuando su accibn estii cwrdinada con b de la torre y del alflf. Y, en ciertos casos, su papel es muy importante en h defensa. Sin embargo, se procura emp1earIa como fuerza de ch-ue en operaciones activas. Tambidn es la pieza m& valiosa; por lo mismo, es insuficiente desde el punto de vista de sus cualidades defensivas. Pues su perdida, sin la debida compenseci6n, causa inevitablemente la derrota; y $S<, al defender la posicidn del rey can esta valiosa pieza, se ha de velar por la seguridad de ella.
que.
sivo+ ~n la siguiente y casi simeeica po-
sícidn, las bjancs amenazan c ~ n ocupar el escaque ZAR.
Diagrama ndm. 24
(Ver diagrama niirn. 23j
F
cipar activmentc en la defensa del rey. Dcspuéi; del enroque a rxno u otro lada, una de dlas sc haIlarS al lado de esta pieza o cerca de ella y.
pondra de la importante manioba T I R - ~ R - ~ C Ro T ~ T - ~ T ~ para CR defender al rey. Bte dispositivo cs impmcindi& en t&o plan defen-
Los ejemplas que acabamos de poner son una infima parte de las insgotables posibilidades que la torre de rey tiene para tomar parte en la defensa de el, Esto eitmbi8n se refiere a la torre de dama que puede defenderlo desde su flanco. Supdngase que el rey y %astorres estin situados sí:
(Ver diagrama n6m. 22)
En esta situaci6n, parece que la AX hablar del papel que &as re- dama negra toma parte activa en la presenhn en b defensa, el rey ha defensa de su rey; pero, de hecho, de contarse entre ellas, pues &te po- deben tomarse medidas para defensee fuerza suficicnk rara defender dese de la amenaza TITR. Im peones y la5 piezas que estAn a Iss torres tarnlrihn pueden pnrti-
su alrededor. Para llevar felizmente a t h i n a un ataqm contra los peones 2CR y 2TR en la posicidn de enroque corto, las blancas deben can-
Punto ZAR. en el carta, defiende Por otra parte, dependientemente de las circunstancias, la torre se puede situar ddante de una de las casillas del flanco del rey en la sexta O séptima horizantal: puede poneme enfrente de la del adversario cn una vertical abierta, y puede tambidn sacrificarse por una pieza menor con objeto de rechazar un ata+
En este caso, pueden defcndef al rey después da los movimientos T2A o T2T can el siguiente movimiento
TZCR. Debe considerarse fa posibiIidad de incorporar rApídameate fa torre de dama a la defensa del rey. Píaalmente, si una torre ocupa. la skptha horizontal y h otra Xa octava, se paeden situar en una vertical abierta y dispowIae para el contraataque. Si en este esquema se a r e p un pc6x en la casilla ZAR, se dis-
Si las negras hacen que los peones del flanco de dama avancen desgreocupadamente, las blancas pueden doblar suc torres en la séptima hori-ntaI; esto les asegurar& la victoria.
al
T a s negras disponen de varios medi= defensivos, de los cuales 1. ..., T I A es el m&% simple; con el proponen el cambio de torres Y, de esta manera, llegan a un final de peones iguülado. Asimismo se pueden efectuar los movimientos T2R o TZA, EI alfil, pieza de mayor alcance qtxe el caballa, aunque menos uunivcrsal* debido a su movlmicnto, es muy valioso en toda acción defemiva; a'to puede versc ea su evotuci6n por el flanco.
Diagrama núm. 26
La * c U c a x pieza defeosiva es e1 caballo; despues de haber evoluMonadeal. escaque A38, puede ser emp i d a en b defensa del rq. Diogrmna núm. 31
Asimismo defiende el pe6n 2CR y protege al rey de toda amenaza Ia octava horizontal.
en Dade esta casifla acttia eficazmente sobre el wntro del tablero y defiende los peones 2AR y 2TR. Una poslcidn dicaz para 61 suele ser tambidn el escaaue ZA de donde defiende el peón o casitia 2T y Iri octava horizontal, y de donde puede evoiucionar a los puntos 3B y 3AR.
Diagrama núm. 27
Diagrama ntim, 32
Esto es fa clásica posici6n de Xa defensa india de rey; de la de Grünfeld; de la variante del Dragtin, y de qtros sistemas de apertura. K u h dw &ciente .serla esta estructura de-peaaes sin el alfil! Esta pieza defiende eficaz y simultinearnente al rey, las escaques inmediatw a 61 y la diagonal en que esta situada. Repetimos que sin ella esta estructura de peones resulta con frecuencia poca s6lida como se verá más adelante. Si se organiza la defensa de ia posici6n de enroque, el alfil de casillas negras puede desplegar una actividad muy eficaz en el escaque 3AR.
Y el alfil de casillas blancas &mbien tiene potencia defensiva cuando esta situado en Ios esca~ues3R, 4AR y 3CR,y s i aportación a la defensa del rey es con frecuencia muy importante.
I
Todo esta es a m d a de ejemplo y no se debe tomar de manera general y terminante por dkfinicibn cfel 23
,"- ,
papel que las piezas representan en
la defensa. Pues no siempre hay que defeoder a1 rey; las medidas defensivas se toman can frecuencia para atrwr casos, y así, las piezas se empXearAn mgiín lo requieran Ias circunsbncias en cada uno de ellos. Con todo, a i conocer ejemplos de defensa de Ia pusición de enroque corto, se pueden analizar las posibiIidades que caracterizan a cada pieza y su aprovechamiento para la defensa en general. Lasker-Bern
San Petersburgo, 1909 Diagrama ntim. 33
A
concreto:
--
--.-A
posicibn del rey al hawx evolucionar en la teoria del media juega la torre XAR a1 escaque ID, y Xas ramente el lector la conoce. blancas aprovechan &a ckcunstancia para Fealizar Ia siguiente con20. r)xp RXC Iiinacidn clgsica con sacrificio de 21. D ~ A P3C
diciones apropiadas para una ruphrra del bloque de punm, mediante la maniobra P 3 C - S S C . Pera aqui &azamn las negras un plan de defensa
y segu.
piezas:
4, TlDlC S, R l A
6. T2T
C2T
lB, CXP 19. C.5C-k
BIT TICR
7. CIR
TIC
C2A
P4T
9, A2D
RXC B3C
....,RlRoRlA,decideZ#. ...,
Las negras hdn consolidado su posici6n defensiva y se disponen a contxaacaar en el flanco de la dama. Ha llegado e1 momeoto en que 1% blancas d e b n tomar medidas defensivas, 8,
.".".. "
Sil9
I)x P,y si 19. RIC, entonca 20. D X P R l q 21, C7A RlC: 22.
+,
+,
C6T+,RXT;23.D8C+&TXD:24. C?A, mate, Esta combinaci6n ya es mnocida
Este movimiento precipita la p6rdida de la partida; el 21, ..., R3T es
relativamente mejor.
22.P4T+ 23. P4C
R3T
C4T
24, A X -F CXA 25.P5C-F AXP 26. P x A f BxP 27+ D4& mate.
Tnteresantec planes de defensa simdtricos; las blancas han impedido e1 movimiento de ruptura PSCD, y las negras el P4CR y PTCR. Ia si-
tuacidn todas.la no se ha definido, aunque la serie de movimientos que acabamos de wr cs muy instructiva. Bormh-Tsiinner Budapest, 1929 lhagrama nkm. 34
k
L;r situaci6n es muy compleja y Ja lucha &Si como quien dice en mantinas, De la posicibn de las piezas y los peones se deduce que las blancas
inicUirbn el ataque en el fianca del rey y las negras en el de la dama, donde sus peones ocupan una posic i h activa. La partida prosiguió as{:
1, P4Th
t P5T
J. TIT
A2R CLA P3T
Este mmovimien- debe efectuarse con mucho tiento, pues crea las con-
U
Aquí la posici6n es casi simhtrica; perp una parte de las piezas Han-
c a tienen mis movilidad. Las negras han mermado Xa solidez de la 25
---
DLQgrma num. 36
DEFENSA DE LOS PUNTOS POCO SOLiDOS NO RELACIQNADOS DIRECTAMENTE CON LA PQSICIQN DE REY
'
Diagrama nu'm. 37
En la partida de ajedrez, el ata-no siempre va dirigido contra el
I
II
I
I
abjet4iixa.- g r i n u o sea, contra el r q , l&objjeto de la ofensiva puede w un p d n aislado o rezagado en ei...-+del tablero, un grupo de geozies que ofrecen un buen bhn#, el praghitci de situar piezas en los p n h s paco s6lidos del adraasno q,&arklcuwr una vertical aibieru en qw hs piezas m;ayo~eejerzan una pxesi6n decisiva. En tales casos el motivo de la ofensiva no es dar mate al rey, sino logras ventaja material o da poriicibn suficiente para alcanzar Ia victoria. Si en Ia siguiente: estructura de peones, las blancas consiguen ocupar los puntos 6D o S A R con el caballo y afianarse en dlos, les brinda muchas ventajas cuando las circunstanSon P F ~ P ~ Cpara ~ ~ S Por las de pmcurar
evitarlo.
Wr diagrama niirn.
35)
He aquf un ejemplo de un ataque de peones con *pocas3 fuerzas, o sea, con los 4TD y 4CD:
Diagrama núm. 38
pcro, daspuds de 2. TRIA, T X T; 3. TXT, la amenaza persiste. Ahora,
las negras disponen de 3. ..., T2D para defenderlo. No obstante toda lo ~xpucsto,es conveniente advertir que, en casos a&, el m6todu de defensa dependc de la situacidn en el. tablera, Lo más conveniente a cada caso particular es la defensa metódica y la transici6n al ataque cuanto sea posible. Todo gebn aislado debe defenderse y procurar cambiarlo tan pronto como se brinde una npaxtunidad para hacerlo, Pero, a veces, un peón aislado se transforma poco a poco e n una fuer-
Diagrama neim, 35
za:
(Ver diagrama nQm. 36)
negra$ deben dudir el debilitamiento de este flanco e intentar un contrajuego en el centro o en el fiaanco dci rey (tanto en esfe esquema coma en 1% demás se sobrenla ~ r a e n d a piezas), Veamas un ejemplo de peones xezagados:
Los dos bandos tieneen un peón rezagado: el 3R, y el 3AD raspecrivamente; ha de tenerse en cuenta que el punto 4A de las negras puede ser ocupado por una pieza de Iüs blancas, y el 4R de A t a s por una pieza de aqu6lta.s. Re aqui otro ejemplo de peones rezagados:
Wer diagrama n h . 38) Las blancas amenrizan con invadir el punto 2AW de su adversario con la torre, de lo que &te puede defenderse, mediante 1. ..., TITIA;
{ver díügrama núm. 39) Aqui, las negras tienen aisbdo el ptdn SD, A consecuencia de las desacertadas maniobras de las bkancas, este peón no sólo ha dejado de sw un dcfecta en Ia gosici6n, sino que asesta un golpe inesperado:
l.
...
2, D x P
PSDI
..,
Si 2 PXP, succde inrnediatamente 2 ..., C5D,
-.para llevar a efecto una h w a a defensia. hwaraical no debe c e d e a menos que una rpmsidad extrema& .dAigue a d4e. &Lat~ w se ha Lgrado con la contragosici6n de ias pkm may~resa cambio de torres
Diagrama niím. 39
entanqq h a d s ñ e 4 p e x a ~ ~ e n lkdefensa de ,1& escaques viabneraMes con Ias piezas menores y en-la w a r a c i 6 n de un contraataqus -en
+ma,
t&
h ha de echarse en el olvido la dwfensa activa. Eor eso, cuando 41 J v e m r i o ataca en et flanco de la h a , d contraataque dirigida a su =y. hace que cambie radicalmente Ia situaci6n en el tablero. Es necesario atender cuidadosamente toda circunstancia que cause
-2.
...
el contraataque, Veamos un ejemplo:
TlD
3. D3AD
P5A!
Diagrama nnine.
D5C!
4. A X P % AXP 6. TlR 7. P3T
WD 4-
CSD
GA+!
+
8, RIA
D5A I
Y las blancas se rindieron; de esta manera fínaliz6 la partida que disptrtaron Kopaiev y Nuvopaschin en el campeonato de la U. R. S. S. por equipos, celebrado en 1954. q-h*.
LA DEFENSA ACTIVA Y PASIVA
~ ~ U C OOpUe8h.
d e aambiarse o hacer q i ~ e
4wan4w.
Los destacados ajedrecistac de la escuela rusa, como M. l. Chigorin, A, A. AIioiin (Alekhine), M. M. Botvinnik, V. V. Smyslov, M. N. Tahl, T. V. Petrosian y otros grandes maestros fueron v son partidarios de fa deftnsa activa. En su arte creador han procurado y procuran ME,*-ilte Xa defensa con la &-ion paulatina del coatraataqbie. Indudablemente, h . v+dwde d ajedrecista ha de sume-sus pbnes a la voluntad del ata-, es desagradable. Mientras que la defensa activa lleva dentro de si b aue se podda llamar el grano de arena de la vic. toria, lograda normalmente y el paso a la contraofensiva o a un final ventajoso. El ajedrecista que se defiende
Los ejemplos de ataque ra el fktmn-
c a de dama san de indoie diversa, aunque, a veces, clásicos; esto permite d que se inicia en el estudio
de la defensa aprovechar una vasta experiencia. del ataqw ea
..
Las negras juegan X. ., T X T; & es oportuno; pero, ~ este mwimiento M Q a,que.resulta despuk del m- si 1. D X T, se produce la davada wqtz%.mrfm. y fas bhncas ganan, mediante 2. b k & a ~ . d o m i n a r l a a v ~ sTIDl, D X D ; 3. T x T + y, luego, dakkis es el momento m& kmpor- P X D.
~
~
~
...,
+
~
-
pasivamente saldd airoso de la cantienda si el ataque de su oponente no es eficaz. Por otra oarte, conviene advertir que, muchas veces, la defensa pasiva estd condicionada por la posición y es objerivamenre el Unico medio para evitar la derrota; cuando succde asf, no hay oWa alternativa que ceñirse a ella, VaIviendo al asunto de Ia defensa activa, se debe advertir que el contraataque no siempre est$ relacionado con el rechazamiento de las amenazas del adversario y puede desarroliarse en ei flanco opuesto. Y, sin embargo, et contraataque no deja de ser un aspecto eficaz de Id defensa act*. EI siguiente cariituIo ofrece ejemplos de estos dos aspectos de la defensa al lector.
SEGUNDA PARTE
EJEMPLOS INSTRUCTIVOS DE DEFENSA
LA DEFENSA ACTIVA, EL CONTRAATAQUE
Diagrama ntIm. 41
rio estudiarlo minuciosmenPe. Y ast, no se debe aceptar este sacrificio y se han de tener presentes las amenazas ASAR o A x M i con la coasigrtienb ASAR. Ls negras se pueden defender con
el coneramavimiento:
Si las blancas tuviesen defendido el punta 2AR, paddan dekidir el resultado de Ia cantknda a,su favor con el movimiento 23. A X R ,,(2J, ..., P3CR: 24, A x B , PxD; 25. A x A). Pero si juegan 23, ASCR, se IB da mate en ctratro jugadas.
k s negras llevan una ventaja mterial considerable; pero el flanco de su rey es vulnerable, lo cual da motivo para eI siguiente sacrificio: 22. A X P
...
~Córnohan de defenderse las negras? Si aceptan el sacrificio, 1s blancas logran, por la menos, hacer tablar despub de 22. ..., PXA; 23. D X PT, TI& 24. A7T+, RXT; 24, '
Pla reporta ninguna ventaja 23. A7T+, BIT& 24. AQAR, A X R , pu= l& negras rechazan el atahue*
A@+. Este moda de atacar al rey sucede can frecwncia; p r dio. es necesd-
Y las negras han tomado h iniciativa.
Las blancas se rindieran.
II
Raibánstein-Taxtakower Besit, 1928
Ultimo intento de a ~ q u e .
Diagrama naim. 42
27. ...
cxc
29. P5C 30. P6C 31. T X C +
RPC
32. RZA
D8T
28. T6T
DIC T3R DIT!
L a blancas se rindieran.
Diagrama núm. $5
Las negras dispusiwon sus fuerzas parti atacar d punto 2CR p pueden reforzar la presidn sobre con la maniobra TIAR 3AB 3CR si las blmcas operan con pasividak mas éstas disponen da un poderasfsimo contramovimiento:
-
21. PSDf
-
,..
Las negras tienen clavado el caballo y el franco de su rey es vulnerable. Su salvación consiste ú n i c m a te en una defensa activa; Iogran efectuar una original comlsinaciSn:
Las blancas quieren evitar et jaque que da ef salto de mbaHo en el ; Con é l interceptan la diagonal do- escaque 7R. Pero les espera una sorminada por ef alfil, importante mo- presa desagradable: mento de la defensa, y emniezan el 29. ... DXTI contraataque intentando quebrantar 30. P X T DXP ta falange de peones del adversario. 31. f X P PXP 32. D2T W2C 22. P X P AxP Luego, prosiguid: 23, T4A A lA 24. P4W1 RlT TlTR 33. AXC \ s.P X P 34. D3C DXPT 35. P4A TI AD DXA+ 36. PXP Las Mancas han rechazada cf ataA4A 37. D X D que y llevan la ventaja dc un ge6n. 1 Alarizaron la victoria despuk de Y las blancas abandonaron. í una Iucha enconada.
Las blancas llevan Ia desventaja de un peSn, aunque sus piezas ocupan una posición muy eficaz, particularmente la dama y ef alfil. Se prosiguih:
Amenazan dar mate en el. escaque
7C. 22.
...
23. T X P I 24. ClfC 25. D2A
PXP D ~ A CxT
...
Las blancas prosiguen atacanda y no tornan en consideracidn Xas posibilidades de defensa de su adversario. Habían de Haber aceptado el recha~rnientodel ataque y proseguir: 25, D3D, C3A; 26. T X T, D X T ; 27, D x T , D X & 28. C7A+, Rlc 29, C x D coa posible resultado de empate, seg6n Ragmin.
Es un movimiento defensivo muy Ingenioso, Las Mancas no pueden responder can 26. AXC, T7D-t ni con 26. TXC, C6R+.
No a fAcil valorar esta gwicih ;a la que se llegb despu& del trigésima segundo movimiento de las negras. 3 s blancas dominan mucho espacio y disponen de los da8 alfiles; esta pareja de piezas ligeras es muy peligrosa cuando dispone de espacio uoperirgtivivon en el tablero. Si hay ocasldn, pueden iniciar una ofensiva de peones en el Banco de rey con P4CR y así sucesivamente. ¿Qué perspectivas tienen las w@as? Por lo pronto han de ponme a Ia defensiva, aunque pueden hacer contrajuega, p w s sus h e m s acfailin en el,pe6n blanco 4R y rambi6n pue-
den abrir una vertical en el flanco de b dama. Por toda lo cual Jas posibilidades de ataque y defensa son m& o menos squi~aleates.EI gran maestro holandés prosiguib:
Sus ulteriores movhientm no son m& que: el paso a la rendicidn.
nente, y, luego, ganaron i i r i j r liirrii y la partida, por abandono dc hir :$(t. versariw.
Y las Mancas se rindieran.
Diagrama nnirn. 48
Como manifiesta la continuacidn de la partida este movimiento cede la iniciativa a las negras. 33. RIA era mejor,
33,
...
34, P X P
PXP
P4A
Esto es uno de aquellos contragoipwi con que parece sutirayarse sf error del movimiento efectuado por el adversario, que e ~ t áconvencido de fa patcncialidad y seguridad de su situación. Las blancas no pueden mponder con 35. P X P, AX A; 36. TXT, TXT; 37. T x T , D X T + , y las negras ganan una pieza a cambio de un gcbn, Idas blancas se halbn en una situaci6n critica; es imposible defender el pedn 48.
Este movimiento no era realizable
si 33. RXA.
Tras el cambio de damas, hs negras ganaron un pebn y lograron una
ventaja sustancial.
Esto es un instructivo ejemplo de srabestimaciSn de las posibiIidades de defensa del adversario.
-
Tras un circunsPaqciado análisis de es?& situacidn se ve que la vuXnerahílidad Be1 flanco del rey negro se compensa con Isr disposicibn dc sus pieza... Muchas ajedrecistas no se atfeverfan a efectuar este rnovimietltu, guiada por rcomidcracianes ge-
nsralesa.
Aquf calcularon, probablemente, las Mancas responder a 23. ..., iX A con 24. D3C+. En este caso, sus prop&itos agresivos podrfan reaIizarse, pues han recuperado d pt6n y los puntos P4R y P4CR de las ncgras son wlneratiles. Con todo, les esperaba una sorpresa desagradable:
L a fuerzas de las negras se des-
envuelven efectivamente.
A h con la desventaja de un pebn, las blancas presentan serias m-zas a su adversario, particularmente rxinAXWT+I Las negras respondieron con un movimiento inesperado:
La iniciativa está ahora en poder: de las negras, mientras que la situn-: d6n de las Biancas se ha agravada ya no queda huella de su actividad. /
Con el d6cirnocuarto movimiento P5AR las blancas comenzaron ci
En esta confusa y contundente situacibn, las blancas llevan una pieza de wntaia; pero SU rey no es¡% suficientemente defendido del ataque de las piezas negras.
ataque en esta prematura fase de la
partida. LCSmo han de jugar Ias negras? A f4. ..., PR X P succdc 15. Sras este muvimienta aparenkCX-, y a 24. ..., PCaXP puede mente decisiva, las negras respondieseguir 15. A X PA, P X A; 16.C X PD, ron con la audaz jugada: DJD; 17. A5C. Las negras hallaron una respuesta muy contundcnk y bastante irnosfaya&: Bta es la fidm posibilidad de defensa unida con e1 canixaataqu* 14. ... AICfl dirigida contra el rey bhnco. 15. P X P C 16. P X P + 17. C X 1% TIA? 19. D3A
C2B X PR DXP
27. PXT=D+
D3A
28, T7R
C5CI DxC+
A consecuencia del contraataque
redizado con precisibn, las negras rechazaron las amenazas de su opo-
29. R2A 30. C X A
3%. RXA
TXD DST*
ASR4-I D!X+l
...
Si 31. R2C o 31. RZR, sucede 31,
..., DXTI
i
-
---
.
.
A,,,"
A-,L.
I
--,
3X,
.,.
32, R2A
DbT -k D5T 4-
25. ,., 29, WZA
Y tablas por jaque continua.
KuIchinski-Pogrebisski
TZR
C X PT
Y las negras ganaron. Esto ea un salíoso ejemplo de dc-
tensa
activa.
conveniente. Ahora, el flanco de la dama esti interceptado y el pebn 5T representa un punto dBb9 en Xa posicidn. Tras una compleja lucha de maniobra, las negras alcanzaron la victoria.
Kerw-Pliater Mascr(r+1947
%
Diagrama ntim. 52
1
Kiev, l838
Liubliaski-Averbiich Mwcd, 1940
Diagrama n$m. 49
Stoitx-Afekhine Munich, 1942
Diugruma núm. 50
Diagruma ndm. 51
2
I
Las negras han demitrado la evoIuciSn de sus piezüs y, al parecer, no pueden tarnar el peón 5AD debido a un inmediato ataque de piezas de su adversario; no obstante, cal+ cularon con precisi6n las posibilidades de defensa y jugaron: 21. ...
CXP
Prosiguio: 22. T8D-k 23. TlAD 24. A3A
B2C P3C
...
28. AST
26. ~ 4 6 :
3331)
Movimierlto defensivo inesperado. ; Si ahora las blancas juegan 27. C X P, sucede 27, . , ., P X P; 28. AZA, T2T y las negras toman la iniciativa. 27. R2A 28, TlRZT
CXT
i
...
29, PTT
IAS blancas sacrificaran una para llegar a esta posici6n y puede decirse que el flanco de su rey se ha quedado sin peones. Esta circunstancia brinda a su adversario la posibilihd de defenderse y contraatacar a un tiempo: 27,
T2C
A2DI
TXC
ALCI C6D-t-I
A 2& T X P sigue 28. ..., T2R con la consiguiente clavada del aEI.
38
Las blancas Empezaron el ataque flanco de dama.
Aunque aparentemente niodcsto, este movimiento es muy contundente. Con él, las negras no s61o rechazan las amenazas de su adversario, sino que amenazan con 10s ma$mientos P4TD y P X P.
Al. parecer, las negras se hunden; pero.. .
M. ... 25. T X'C 26, R l C 27, A X A
en
1
¡
El ataque ha sido rechazado. 51 movimiento 29. P x P, A X PC no e&
...
28. A X P 2%. D4B 30, A X A
JX. RZA 32, T7RS
CST DlT! AXP C6A -tTXA
BIA
El ataque de Xas Mancas ha sido neutralizada; admis, no tienen gasibilidades de defenderse. Dspuds de 33, D68, D5T-f-, las blancas se rindieron, porque, como indica Akkhine, 34. BX,N+; 35. RZA, P6C-k; 35. R x C T4A+ y 37. ..., T4R+.
Sobre la posicihn de las negras sa ciernan nubes tormentosas, aunque el bloque de peones de %u rey no tiene nirrgiin punto debil y el cabaIlo defiende el pe6n ZTR, El rey Manco se ha quedado sin grotcccí6n de peones, pues éstos han sido Janzados al araque, Veanos cSmo se desarrollaran b~ ,,,tecimienCos: Z5a
...
2g A4D
TfTlC
...
Evidentemente, las filancas sobreestiman su posición. 25. TZA era mds eficaz,
25.
...
27. RIT
TXP?
D5CI
Lis negras se defienden tenazmente; atacan ai alfil y con eXXe ganan un tremgo que les permite situar la dama en Xa irnwrtante diagonal de casilIas blancas. 28. A x f
...
A l parecer, cifraron todas sus esperamas en este sacrificio.
35,
l
A
''
sucede AJA! y f a
arncnaza de mate T8R.
...
RXA
3@. P6A+ 31. P X A
R1C
29.
...
A 31. DST segula C3R.
Cabe suponer que las blancas no meditaron sobre su ciluacibn y, por inercia, continuaron el ataque. Era más eficaz 33. BIT, D2C; 34. RlC, D3Cf y jaque continuo, lógico re+ sulrado de esta violenta lucha.
Como indic6 el maestro V. Panov en el informe del torneo las negras hubiesen podido realizar un podsroso ataque con al movimiento 33. ..., C3C. Por lo visto, o no les dio tiempo a cambiar de parecer o mostraron respeto al nombre dc su oponente y sc conformaron con uri empate. L a
SIMPLTFICACION DEL JUEGO Y PASO A LA FASE FLF6AL
partida prosiguió asi:
36. D3A 37. TxD 38. WTR $9. ~ Z A 40. R3C . --
41.
---
DXD+ CJB R2C . T8TR
T8C
+
Capablanca-Alekhine Buenos Aires, 1927
R3T
Y se convino en que eran ?&las, sin embargo, IIevar las negras ia ventaja de un pe6n.
Esto es la esencia del plan defensivo de ellas: sacrifican eI pe6n para continuar simplificando el juego y procurando un final de rrlfties de msillas d e distinto color quc son d verdadero precursor del empate. 21. C X F A 22. P X A 23. T X T 24. TID 25. A3A 26. AXP-k 27. P3CD
RxC TxP PXT
A3Af TIAD R 2R A7C!
Las negras han realizado su plan: su adversario no puede impedir el cambio de torres. Esta posicidn se produjo en la ciecimoquinta partida de1 maicIi para fii campeonato del mundo. Aunque ya han efectuado el rümlrio de damas, quedan muchas piezas en el tablero y Ia Iucha se halla en fit fase media de k partida, Las blancas intentan ocupar Ia vertical abierta con las torres y atacar de paso el peán 3CD. [,as negru decidieron oportunameni i simplificar 1s posici6n:
17.
...
18. C X C
CCiR AXA
Y empate.
(Ver diagrama núm. 5 4 ) El vigCsimo sexto;mwimiento C4D puso a las negras en una situación dificil; no S conveniente 26. ..., CXC; 27. P X C y el pe6n 4D es in-
Diagrama núm. 54 Se lxa creado e n que Ia veni mente tedrica, pueden ganar.
Diagrama ntinr. SS
Y empate; la desventaja auc las: negras IIevan de un pe6n se campensn con la activa posicion de .sir rey y torre.
Diagrama neim. 55 .. . -
Bljovskl-KuxnIetsov M o s d , 1958
- -.
Diagrama n h . 57 vuinerabie. Por otra parte, Ias blancas amenazan con tomar el peón 2TR y debilitar el frente de su adversarici, mediante el cambio en el escaque
5R.
Juegan las negras; el amenazador peon 7D les obliga a tomar una decisi6n heroica. Su defensa consiste en el pasa a la final, edificatldo una fortaleza inexpugnable.
Por supuesto que 28. DXP'T?, TfTD no es conveniente. Despiiés de1 cambio de damas, las blancas
... TXT Si 52. ..., TfT, entonces 53. T X T, sa
confian en debilitar la posici6n de 10.5 peones negros y, así, lograr un final favorable a ellas.
A X T : 96. D4T, D x T.
P4C; 55, D4R+
y
Con lo quc iniciaron el atirqde contra la desmantelada posición del flanco del rey. Indudablemente, et plan de defensa de las negras esi.riba en este movimiento para pasar a la fase finaf. Lasker moviliza inmcdia t amente la torre; esto, en el fina1 dde la partida, suele ser más importante y conveniente que la Iucha pasiva por nsantener e1 equilibrio material; por ejemplo, el. movimiento 29. . .., T4X) en estc caso concreto,
30. P X P 31. T X P 32, T X T
fXP TX'IT
33. T7R-f-
RJT
TXP
Momento aleccionador. Snxys'iov inrentü el cambio de las piezas atacantes: 23. 24. 25. 26.
PXP
TXTS PxD PXA
DxD
axT
AxC TZCR
<,S,
i
I
Recuperar cl peón y adoptan/una posición defensiva. La partida Fnati26 en tablas.
Las blancas sacaron todo cl provecho w i b h de la posici6n reflejada en el diagrama. Ahora ganan los peaaes del flanco de dama de su adversario, mientras que éste lleva a cabo 6U plan de defensa. IS. ... $9- DXPjr 60. DXP 61. D x P
juegan las negras; tienen un caballo por un pe&ri, es decir, urta vent.afa material deckiva. Pero las Hancas amenazan mate con T8A y D6A y atacan simultáneamente al caballo y a la dama de su adversario, que hall6 una salida ingeniosa y fon6 la simplificación del juego, lo cual es uno de los aspectos importantes de Ia defensa. Prosigui6:
T2D R3T B2T
T4D
Y las negras ganaron.
1
Imker-AIekhine San Petersburgo, 1914
Diagrama ntím. 59
Dingramle núm. 60
Las negras juegan; llevan una torre de desventaja y la situacibn de su
Suele suceder guc el bando que estP a la defensiva ha de eludir toda ventaja material. con objeto de re-
EL SACRIFICIO COMO MEDIO DE DEFENSA
Si 3. T4D, las n e g r s recuperaban la calidad, mediante 3. ..., A4AD.
Diugrmff núm. S8
Hagamos un resumen de las upcraciones realizadas por la negras: sólo han obtenido un gedn por 1ü calidad, cuando su compensaci6n es de dos peones; pera han liquidado la pieza atacante ma's amrnazadora al paso que sus dos alfiles, particularmente rl de casillas Mancas, son mtty poderosos e n esta situación. 4. TID 3. P3TB 6. D6C 7, T X A !
A4D P4A D x PA
,..
rey no es satisfactoria ni mucho menos. Pero el joven Alekbine 11eg6 deIihradamente a esta posiciSn contando con recuraos insoslayables. Prosiguió:
Este movimiento pone de mani-
L a blancas restituye11 oportunamente la calidad.
Las piezas blancas apuntan amenaz~doramente3 la p0sici6n del rey negro. El &¿que pusde ser apoyado por eX movimiento P5AR. Pero ahora juegan las negras y el usentidb de1 &te jaque de =pera es necesario, peligro3 (hila frase que A. G t o v usa en su obra aEl. legado ajedre- porque, si juegan primero 7, ..., cistico de A. A. Aliajinii, t:omo P X T , 8, D6R-F y D X Y . segundo) sugiri6 al gran maestro Ruhinstcin un excelente plan de de8. RIT PXT fensa: 9. DXPA TID 10. T X P I 1. ... T x A! 1 2. Txl' ASR 3, 1'2D ... La partida finalizó en tablas/
\
chazar el ataque. En la sítuacidn re-
ficjada en eX diagrama, b blancas samificsirori un cafiaIlo en su 5 1 t h ~ movimiento 17. C X H A + , contando con que sucede& 17. ..., PXC; 18. D S D ! y, así, se complicarla e1 juego. Pero las negras respondieran
con:
fiesto las pasibilidades de defensa y contra8taque de las negras.
No es dificil convencerse de que,
D X T, DX T + , las negrds logran hacer tsibbs, mediante et jaque continuo. si 21.
Tras esto, se vc que, despues de 18. C X T+, D X C : -19, MAD, las; negras disponen de Ia respuesta 19, ..., D3Ai, con lo que rechazan e? ataque y mantienen la ventaja mattrlal. blancsts tornaron otra determinación: 18. A X P
Y empate por
jaque continuo. 22.
%1A, D6T-E; 23.
m, M A S - ;
24,
RXB, TZD era peligroso para las blancas.
19. A 6 8
T2A
...
Sí 19. DEiAD, sucede C3D; 20. D x A, T4At y, fuego, T X C, 49;
19. ... 20, TDID
133D TDlAR
23, D5CD
D3A
a PXT+
7 . AXP-I 8. A4T t. Y. TD4C+
PXU
lO.jfR4A
Y 1 s negras ganaron gracia a su ventaja material,
R2A
E3C R4T ..
/
'
Capablanca-Schtlren
Rcstit iiycii~trit t i i i i taja mlilcrial y
PXP
Después d e haber efectuada nueve movimientos can jaque, han evitado el mate y tienen dos torres por
Las negras fuerzan el cambio de damas, amenazando can D X PLT, pera evitar la amenala T8A+ y DKF de su oponente.
, +.
11. TSC+ $2 T6A-t-1 13. T5T-t-! 14. A X D
RXT
PSIi
La partida frnalizS en tablas.
26. A6R 27, DXD 29, TI-3R
P4R R3T DXT Resultó un final de alfiles de casillas de distinto color con empate. En el ejemplo que acabamos de poner, las blancas vudieron evitar la derrota restituyendo oportunamente Ia pieza de ventaja que 1Xe-
vaban,
r,iibl
dad, las ncgr:ts infclif;in rcciiii4xiir rl ataque y pasar ;i 1:i kisc 6ri:iI (lc !u partida:
28. A X T
dama.
piii'ir i I r * la vnii
~;;rcriS~c;ttirlri iiiiii
WA AxD
CxA
A3A
El objctivo se ha lograda y e1 problema estriba en realizar la superioridad. En efecto; las negras ganaron la partida al efectuar el quincuag4simo quinto movimiento.
Diagrama núnt. 64
Diagrama ndm. 62
Diagrama ntim. 6 3
Las blancas Iievan una calidad y un pe6a de ventaja y, como la amenaza de las negras parece ser decisiva, su salvacirjn está únicamente en el contraataque con jriqua u1 rcy; de otro modo, las negras dan mate en Ias vasillas 2CR o 1TR. Capablanca haIl6 un ingenioso y eficaz medio de defensa que entra~ C ~ J Xhan O de defenderse 12s Ea el sacrificio de la dama, blancas tras e1 movimiento 22. ..., La contienda prosiguió así: T6A? No se puede jugar 23. D x T , 1. PXPIR IA D X T + ni 23. PXT, D X P y mate. 2. D4C-fA2R Se amenaza con 23. ..., T X A! o 23. 3.DXA-C.I RXI) ..., TLD. Las blancas llevan un alfil 4.PBA-D.,ITXD de ventaja y deban restituirlo para poder continuar la lucha. 5. A5C+ T3A
No hay otra manera de defenderse, pues se amenaza mate con X8D.
23. A3RI
TXA
24:TXT
DxT
Las blancas kan sacrificado una pieza ligera por un pe6n, con 10 que crean una situación de ataque amcnnzadora, Y las negras tomaron tina Jcckihn oportuna:
El bando blanco Heva dos peones de desventaja; con todo, cifr6 la esperanza en iniciar un ataque peligroso en el centro despuk de 17. P5R Realrnenre, 17. ..., C5% no es posible debido a 18. CXC, PXC; 19, AXC, y s i 17. ..., CQT, entancs 18. PSR o 1%.C X Pf).Conviene advertir que estas variantes se apoyan sobre la cbvada del caballo negro 2D; clavada que no es real, sino imaginaria.
1
. ".L. - - - -Si los das primeros nnovhientos
de las negras parecieron &=perados, ahora se ve clara su idea: sacri-
Aqnise ve que 18. AXD, C x C - f - ; 19, H1A, C X T ; 20. TXC, A x A na ficando b torre, lograron proteger es conveniente a las blancrs. Pues a s rey y contraatacaron peligrosa-
&,
I)spu&s de esto, no ha quedado
ni huella del ataque do las blancas, Las negras ganaron pronto la parttda, porque su contragolpe defensiva fue decisivo. Andrefev-LmtRov Campeonato Juvenil
de la URSS
Moscrí, 1949
Diagrama núm. 65
Ai sacrificar la dama, las nenrüs no obtuvirron la compehsaci6n -haterid debida: pero neutraIizaron el ataque de su adversario y edificaron una rfortale~a. inexpugnable. Los dos grandes maestros acordaron dejarlo en tablas ya d efectuarse 1a jugada 42. . ..,T X T ,
Aqui pasaron las Mancas a h defensiva,
i:1 Iitiiitlri Iiliiiii.ti rir4 i~,iiitil,Iiiir iiik p ~ ~ . Y , I YI/I* Y I I 1111 V ~ W t$i I VeAmuslo: 14. I)h(:. 't 11' 6 8 13. R X T y A I A -1. y nxtlv [ h ~ i i ~ t I~~ I I , I
iugada.
Jariton-Rasenberg ,Moscir, 1954
Lilienrhal-Nmhmietdinov Kiev, 1954
D i a g r a m niíin. 68
Empate porque las negras dan ia-
que cantinuo coa D6A y D7C.
1301wlavski-ScaJrlbexg Suiza, f 953
Las blancas sacrificaron una pieza, el rey negro sc halla en una situaci6n muy peligrosa; con todo, 13s
y
negras pueden defenderse si saai%canla dama, Prosigui&:
Las blancas sacrificaron un alfil y dos peones para lograr esta posicibn. Y hs negras pueden defendersc sólo desbaratando eX plan dc su
adversario: 16" ... 17. D X D
DxC PXP
Estos dos peones amenazadores deciden e l resutkada de Xa contienda. Yrasiguici: Ya efectuado el trighimo s&ptima movimiento D6C de las blancas es dZfciI defenderse; caso de retirar el Se Eeg6 a csta sitrracibn despues caballo del escaque 4CD, sucede de la cuatrigdsirnw primera jugada
DXP+. Pero Lutikav mostrá una ingenimidiid extraordinaria al hallar valiosas e insospechañles posibilidades de defensa activa:
38, D X C
T x C!
de las Mancas. Ante Ia amenaza
T8A-I-, Stahfbergha116 un medio de-
fensivo interesante:
...
41. 42. T8A S43. T x T + 46. A X D
c4C1 T X TI DXT
RXA
La escena ha cambiado totalmenEs cierto que las blancas equilibran sus fuerzas, esta es, Ia dama y dos peones contra una torre y dos riXfiies; pero su situací6n es desesperanzador¿, pues Ias piezas negras dominan todo el tablero.
te.
18. 0-0 19. P4T 20.
PXP
21. P4A 22. D3C 23. D3I) 24. P X P 25. D X T
C3A
P3A
TXP TXT
C5D
P4R
26. R2T
T7T i., P7A CBA 4-
27. fX C
A4A
U1 s bXancas se rindieron, porque n 28. D5C sigui6
TIT.
I
Despues de 19. ..., C4D, la posici6n de las blancas parece indefendible. Pcro, con su extraordinaria inventiva táctica, pudo Alekhine haIIar ana imprevisible gosibitidad d e defensa. Hay que advertir que esta partida formaba parte de una sesi6n de juego simultáneo cn que el maese thO jug6 con los ojos vendadas. La partida hnaliz6 asf:
PROCEDlMIENTOS TAC'PXCOS DE DEFENSA
26, C X C l
21. A xnrn 22. C6A-1-
Qrschanski-Bronaberg
Riev, 1931
Biagrma núm. 63
AXT
La partida quedb en tablas. E1 logro de un empate ~ o medio r de jaque continuo surfe sriceder en situaciones difíciXcs.
PXC
..., 1 1 A ; 3. TxP, PXC; 4. A X P y el mate es inevitable.
O bien 2.
3. T4C+ 4" AlAl
Por su parte, las bblancas no pued m comer la dama (78. D x D, DXP-F y DXC).
DXD RXA
i E ~ t a tentacidn es incontenible1 Con todo, tcriian que haber ~ugado l. . ,, P4A!
2. CSA-t-1
No se puer:le jirg;ir 77. . ., 1) x 1) t, porque se da mate rfeiri rri di: (iii.; iii gadas.
Tablas por iaque continuo.
R1A
No pueden defenderse de la amenaza de mate AST-F y T8C+. Alekhine-Mezirov Chicago, X 9'3 1 Daagrma núm. 70
Las negras llevan una ca11dad y un pc6n de ventaja, adem& de tener bien situados 10s peones. Sin embargo, su dama cstA al margen del J U E ~ O , es decir, permanece inactiva y su rey puede ser el objeto de ataque del adversario, cuanta más que la torre y el alfil de éste apuntan hacia la mic16n de él. Y las blancas decidleron aprovechar esta ugortu-
1
La superioridad de las negras es evidente: un ncBn está en el umbral de la uconvefsibni y otro, e1 3CD, puede ñvanrar paco n pmo. Por tanto, tas Mancas han de defeeidersc vaIi4ndosa psogresivarnentc de la superioridad de su oponente. Prosigui4
Ea situací6n de las blancas piirece critica t r a ed maultniento 24. ..., ñ1C de aa dvewnrin. aunque no hay diferencia material, las piezas de las negras estin nitdor situadas, y las blancas tienen mal defendidos los peones 3Cl3 y 4D. Prusegitir 25" C X M , T2A es perdrsr e! cabfiltu. Ea partida contiarri6 ;ir<:
-.
LS negras tienen poca movilidad,
Coma se ve por st anterior comentario es Xe hita jugada &5. P41'D, P3TD no hace variar b situaci6n) que entraña una pequeña celada.
25. ...
TIA
Aqui consiguen las blancas mplrar un poco; pueden orginizeir su defensa, y simplificar el juego. &E, negras han de de~iseirde1 atrayente rnovímicatto 25. ..., T3A debido a 26. ~ x P ! ,T X C ; 27. TXA+I,RXT; 28. PXP+ y PXT. Por ellii, las blancas consiguieron defender SU qirebrantada gosicián, 26. T3A
27. PXPl 28. PXC 29. P x p
C3C AXA AXP
A4A+
Y 10s caballos de
su adversario ocu-
pan una prnici6n activa. La jugada 44. T,$T les ha planteada un dificil ~mMemade defensa; el pasivo movimiento CIA no evita que el pe6n 3C sea de nuevo atacado con 45. D5C. NO obstante Xa cual, disponen de una posibilidad ta'cttca de safvacidn :
Tras estas dos eficaces Aplicas, son las bbncas las que han de procurar salvarse; timen amenazadas la torre y la dama.
46, D7A+
DXI)
47.CxD
. R x C X3C P5C
48.TXC-F
49. T3T
Con la jugada 18, T5D, las blancas amenazan das piezas de SE adversario, LCamo baa de defenderse las negras? Faallarfin una rcspusta rfnica y jugaran:
succdc 4. Pb't' I
- --
y iialitirr iiitr n t # h
ahogado, Lo convenicntc cr;r 2, . , .+ '1 X A t y , con dos peones de vciii:i{a, I i i i r negras tenían que ganar In p:irlrda.
Con lo que el alfil 4AR estd defendido directamwte y el 4AX) indirectameenre. P u s no se puede comer debida a 19. ..., C6C+ y M. ..., C X T, El propósito de X;ts Mam cas de obtener ventaja, mediante 29. . P4CrA2R!; 20, TXC, A X C , no es realizabfc, 21. T4A por suceder 21.
Xo~r~taxttinafwlski-Kan Tbilisi, 1937 Diugruma ndm. 76
.... A4C.
PoXiak-Kogan Rasfov del Don, 193 7
E1 panorama ha cambiado totallas negras han sacrificado un la posible mntinuaci6n 30.- - 8 1 ~ ; pedn, pero amenazan con atacar por AxP; 31. CXPI, T X C ; 32. T x T , Ia vertical TR, R X T ; 33, T7D+ y 34. T X A es Dmpuh dc una lucha tenaz, la tablas. partida finaIiz6 en tablas, mente:
Se Ilegd a esta paici6n despuk
dc 19. D X .
Biagmma núm. 73
La situan6n de bs negras es evidentemente peor que h de su &versario, pues no se ve la manersl de defenderse del doblaje de tomes en f a verrica1 a&ie&a con el, consi$uienre ataquc que entrda mate o, por lo menos, e1 sacrificio del alfil por el caballo y el desbaratamiento d d Hoque de peones que defiende al rey, No es posible X9. ..., DxP; 20Las negras llevan ventaja material A X C ni 19. ..., CXPD; 20. A X A , y atacan. Y, zil no poder defenderac R X A; 21. D6T+. satisfactorkmente, tas blancas intentaron salvarse can una curioca celada que ~ncierra el movimisnT-o 1. D8T. Prasigui6: Las negras contaban con este movimiento; el 21. P3C y, despues, la rnnnisbra TXD-2D-21: es mis eficaz. 3. DIT+l! aquí la celadal A 3. ..., T x l3
21. , >.
22. A X l
m 1 C5R
LaJ blancas llevan ventaja material Y atacan. Al parecer no hay forma de defenderse de Isi amenaza de mate A.x.A+ y T8C. No obstante, las negras no s61o pueden defenderse por el procedimiento tictico; tambien obtienen superioridad. La partida grosigtri6 de una manera
Diagrama nzim. 81
inesperada:
LA ACTIVIDAD FORZADA DEL REY A X4. R l R sucede D X T. t7. . .. l3, A X C 19; P X A
Zms negras rccuperriron u& pieza;
Eonservruon el peSn de ventaja, y ganaran la partida. Vciskdi-Jo&ha Albania, 1954
23. 24. T X D 25. RXC 26. PXC
D8R -i-
, + A
,
Diugrnma nelrn. 82
C7A-tCXT+
FxD
Las negras ganaron una calidad -- v k victoria. (Ver diagrama núm. 81) Sin duda$ el banda blanco no nr - -~ vi6 los ocultos recursos defensivos A primera vista garece que las ne- de su adversario ea el discurso de gra.5 debrian xeadhse, porquc no la contienda. hay modo de evitar e1 mate. Pero Es necesario prever g calcular eslas blancas fueron las que hubieron tos recursos para evitar toda sorprede rendirse. sa desagradable. consiguieron
R2A1 AxC A01
IEI cabailo, que sn la variante anterior pudo evolucionar activamente,
ahora esti trabado! Conviene advertir que las negras debieron de prever el geXigroso ataque de las torres blancas.
.r
-
Este movimientci ilcva la ganancia de una pieza. 22. T x P 23. A3T-F 24, T7R 25, RIA 26. T7A+
Las blancas atacan simultineamentorre y al caballo con el. alfil: de esta manera, recuperan la pieza te a la
AxC R3A TIC+ TLTXI)
R3C
Dr! esa manera, las negras rechazaron el ataque y mantuvieron la ventaja material. La partida finaliz6 en una merecida victoria de Oigorin.
sacrificada anteriormenPe. Pero e1 principal peligro para Xas negras es la posicidn de su rey. Es cierta que podrian enxocar, pues esta pieza y torre airn no han sido movidos. De hacerlo asi, podria seguirse este orden de movimientos: 17. ..., 0-0; 18. (Ver diagrama nSim. 83) AxC, A x C ; 19. PxA, TxP; 20. CBR y 1s blancas compensarlan Xa Las blanas tienen sq;yperior!dad pérdida del pebn con una mayor actividad de sus piezas. Pero Chigo- material; pero su rey está mal situarin ha116 una soluci6n audaz y mu- do y la torre se b d a d masen del juego. No se puede aprovechar esta cho más eficaz:
"
Diagrama nUm. 83
Diagrama ntfm. 84
Padevski-thda~ov
Sofía, 1455 Diograma nzím.
85
~Adóndc dialie rctiriirsc r!i viay!
Si 36. ..., RlC?; surcar 37. 'TH'I', ñlA: 38, T x T , DxT; 39. C7H I. El 16gico movimiento 36. .. -,R 1 A ofrece a las blancas la pasibilidatf d e 12 bella combinacici4n 37, D5Ct, TIA; 3R. - - - Da Df-; TXD; 38, T8T. Ayiib, la única defensa es unü continuaci6n audaz.
Mueviirnente es fa iinica jugada, ..., P x T ; 38. TXP-l- na ES conveniente. pires 37,
superirnidad s i no se proteje primeramente a1 rey. Cuando hay que defenderse sc toman decisianm auda-
Ia partida finaIiz6 en tablas. Conio se ve e1 avance del rey puedc ser, a veces, el objeto de la de-
con que Alekhine realiza una defensa muy dificil,
fensa.
arriesgadas, La cucontinuacibn fue inesperada:
ces y
Con este movimiento fas negras se defienden de la temible amenaza DSR -k
.
41. D7D El propbsito del bando negra de camplicar d juego ha sido neutral:mdo: s6to pueden dar unos jaques ai rey.
42. A3B
DIC RKI
Ptrede decirse que esto es Ia cfave del plm defensivo de Xas negras: avanzan con su rcy, aun cuando parezca una acci6n poco esperanzadora. 43. B x P +
RST
Esto es una sorpresa desagrada-
Me para las blanca*, que unas juga-
Y las negras se rindieron.
(Ver diagrama nhm, 84)
EI rey negro se encuentra en una. situacidn de peligra. Ea instructivo anaIiar la habilidad y la audacia
das antes pensaban probablemente alcanzar la victoria. El rey negro es invulnerable en su extraordinaria posici6n. 44. T x P T 45. D x T + 46. A X x l
Y empate.
TXT
DXD A4A
:,
1
'! i
j
VARIOS EJEMPLOS DE DEFENSA ,
:
Es una iugada audaz que requiere un circunstanchdo an6lXis de la posici6n y de las posibilidades de defensa. 11.
...
12. P4AD 13. C1T
A3C P5T P6T
Esta combinacibn es muy alrayente, pefo menos eficaz que U. C5C.
...,
1L;is negus tictir:ii niiiirritir$iturl si!
ambos flancos, :itinqtrc VN ~ ~ c l t ' t ltrll a hable que síiyuen priivccliri {la rliii. E X ataque contra el pc6n JCR ric ptirde neutralizar fsciimente. El nfan de ofensiva en el flanco de la dama p;irece ser mas realizable; en 61 pueden operar la dama y la torre protegiendo el avance dc las peones TD y CD. Pero Maroczy se opone oportunamente a este plan.
33, P4AI 34. T X P
MarshalX-Capablaaca 1925
Diagrama núm. 86
Y las que ganan una calidad son las negí% porque, despues de 4.
T X B , sigue 4.
..., PXD.
Tarrakavw.Ruh~n~tein Ostrava Moravskaia, 1923
~sto es la clave de la defensa de Capablanca decidi6 forzar el emlas blancas; su oponente esperaba posiblemente 14. P X C, P X P +; 15- pate, puesto que no se ve ningítn RXP, D6T-P. plan activa de juego para ias negras despugs de 33. P4A. Mas sucedi6 lo 14. ... fXPf inaqperado: 15. RLC
Emplean el geSn de su adversario para defender a su rey. Es un curioso- eiemoio de defensa Que tiene a-, menudo un valor esenckl. En esta ~ s i c í 6 n el , ataque de las negras ha sido rechazado y, además, pierden el caballo, pues las blancas dominan la irnica casilla adonde padia retim
Diagrama núm. 87
PXP TxF
tai deferi~a conveniente era 3.5.
R X TI, TIC+; 3á R3Tf, T X ; 37. RZT!, D X P+; 31. DJT, .DJA; 39, D3D, D5T+, lo cual hubiese finalizado en tablas.
Recomendamos al lector que afitnalice atentanlente esta variante y, al rarse. tiempo, recuerde: Nunca deEl resultado de Xa contienda pw- propio be cundir el pdnico, por m& aterratenece a las blanca^^ dor que parezca un inesperado movimieato del adversario, ni hay que creer ciegamente en la autoridad de un oponente de renombre, ni sobreestimar el podw de los movimientos realizados por 61.
Las blancas amsnazaxn con tomar el caballo con la dama. H las negras
Lo que a primera vista parece un error por causa de la xespusta:
Al parecer, las blancas Xlnn ganada una pie= Pero...
35.
Causa impresión de que las blancas van a encontrarse con dificultades en ef desertvolvimiento de sus
piezas; pueden enmcar, s i Men etx) pare= muy peligroso, porque las negras tienen abierta la vertical CD Y e2 pedn TD avanza ammazarrdo, Y, con todo, efectuaron el aparentemente paraddiico movimiento:
...
TXT
Yas negras llevan un pe6n de veoraja y sus piezas estan mejor situadas que las de su contrincante. Pra~igui6:
.
29. P6A+ ni 28. .., A X ; 29. PSA, A I T y el alfil queda inmaviIizildo,
Y las blancas se rindieron, porque Iiar adversario iba reforzando la posición, lo cual hrtbria de valerfe ine v tablcmen ~ te la victoria. Canal-Gxiinfeld Merano, 1926
tancia bastante prometedora; pero &te ha organizado una defensa sSlida, Dewando acercarse cuanto antes al rey contrario, Ates hizo una juga-
da audaz:
No se puede, por supuesto, 30, ..., P XC?;31. EPFiT, y el mate cs inevitable. Ahora, a 31. D6T sucede 31. ..., TIC. J I , C5D 32. F X A
A primera vista parece que la dedel rey blanco se desmorona.
fe,
Pero...
AXC T2T
34. C X X ! 35. TXP! 36. TIC 37. D X D 38. TID
ReaImente, la Iuchtt ha terminado.
El ataque de las blancas fracas6 ante una defensa muy precisa y hubieron de rendirse transcurridos unos movimientos,
fXP+
D4C C6T TA X D
El ataque ha sido recha-do; las blancas mantienen la ventaja de un peón, y ecstdn mejor situadas, al paso que el dfit negro continúa sin participar por entero en el juego. Vidmar gan6 esta partida.
Vidmar-At= Londres, 1927
~ ' a g r a m uniim. 90
Spielmann-Alekhlne Nueva York 1927 Diagrama ndm. 91
alfiles y presionan en el f!anco de la dama. Considerando que la superioridad del adversario puede ir aumentanda v ser decisiva, las blancas comenzaron una operacibn ofensiva en eI fIanco del rey.
ES el único movimiento eficaz, pues no es conveniente 28. ..., B K ;
22.
...
23. P X P 24. T x T
PTD!
MD!
.,.
A 24. D X P sucede CXP; 25. C X C , PXC, con Io que las negras atacarían el punto 2AR y toman'an la iniciativa,
..
24. .
25. DCiR
TXT
...
Con e1 cambio de damas, quieren llevar et jucga a la fase final. Según A. Korov, 25, Dxi' E. relativamente mejor, aunque las ncgas continúan manteniendo su contrajuego: este gran maestro estima guc IaS negras tienen asegurado el empate d s pu& de 25. DXP, CXP; 26. CxC, D XC; 27. TXAR, T1R. 2% ... 26, DJC 27. P x D
D5C!
DXD ..A
Tras este cambio, ias blancas ticncn muchos puntos dkbiles, y las negras consiguen f6cilmente hacer tablas. Se prosiguib:
La posicibn de las negras es un paco mejor que la de su contrincante, porque disponen de la pareja de
Las negras no se opusieron a ella y tomaron este pedn despub de haber valorado sus posibilidades defensivas.
punto atacatite. i,ii~r ~ r ~ r i ~~Ht I~I ,ni1 parte, tienen Jisytieslir!: H ~ I H t ~ i re* t para una accidn ciicaz y si1 i r y i.uiii bastante seguro dctris del t i l o i i t i l . que forman los tres peoncs. Este conjunto de circunstanci;i:i perrnite a las negras elegir un mbtcido de defensa activa:
TID
T4D MCD P4TB B1C Las blancas han efectuado el trigésirno tercero movimiento. Las dos bandos atacan en distintos flancos y, por la dispusici6n de sus fiierzas, se ve que sus objetivos son diferentes. E1 bando blanco ha cans ~ g u i d oque el alfil negro &=tivamente al margen del juego; esto iia de repercutir tarde o temprano en Ia situad6n de su adversario, que ataca directamente al rey, circuns-
BZA R3R
j
C2B 831)
C4D
1
superioridad de I;ts blancas prtrece evidente, porque sus giez;ls mayores se han adentrado en el cmpo de su adversaria y amenazan ron tcmar el p c h 2CD; ademh, el pe6n negro aislado puede llegar ri ser un
C5€+ C4D C5C-t
C4D Tablas.
Euwe-Przepiarka La Haya, 1828 Diagrama ntím. 92
I
/
20. P3CD 21. TLAD 22. PSD
Ates-Colle
PXP
I)irtgtqiiirirt iiiliir
W
Scarboro, 1930
C5A
C X PD
Diagrama núm. 93
Las negras han aceptada d sacrificio de estos dos peones; mas &ora Iw aguarda una defensa muy dificil.
23. C4D
24. CXP4C 24. T % C 26, T4T
D2C DXC
DU: A5C
De nuevo, hacen evotucionar el alfil y se defienden de la amenaza 27. T X A - t I , D X T ; 28. DX+, 27. DJD 2%. A2D
Can d movimiento 19. A$C, las blancas proponen el cambio de alfiles. Las negras arfn no han enrocado; al parecer, lw convendria este cambio con objeto de simplificar la posicihn; pero no es as¡, porque a 19. ..., A X A , sigue 20, C6D-I- y gierden el enroque, Tambidn cs clkrto que las b h n w no podrían recuperar el alfil hasta después de haber jugado A4R; de otra modo, se les darfa mate en la crisilh 2CR Pero como a las negras les conviene mantener dicho alfil para la deknsa del escaque 3D, el maestro polaco hizo este aparentemente paradbjica movimiento:
No es fici1 decidirse a respuwta tal, cuanto más que agrava las deficiencias ya exisrentes en la evolución de las piezas negras. Con todo y con eso, las Mancas no pueden sacar provecho de la activa dispwicih de lsts suyas, porque la pmíci6n de su adversario es muy s6Iida. Pero, deseando hacer real y efectiva su plleponderancia evolutiva, Euwe empe26 el ataque sacrificando dos peones, He aqul su resultado:
P3T A2R!
Sacrifican un tiempo, pera conservan &e alfil muy valioso para la defensa. ,
29. T5T 30. P x P a. p, 31. C X C + 32. D6C-t33. A3%
P4A CxP AXC
R2R
Las Mancas efectuaron la maniobra TI-T-3TD-3TR y avanzaron el peán CR para atacar al rey de su uint~incante;pero nu hay realmente puntos d6bilm en la posicidn de este. Se parniguió:
TIAD
iQué dificil es defenderse cuando el rey está sin enrocar! Za torre ha podido entrar en acción al trigbsipo tercero movimiento, si kcn con &uchn eficacia. Con la amenaza de mate en el escaque 8AD, las negras evitan el peligroso movimiento T7T. A Euwe debib de fatigarle la te-
naz resistencia de su adversario e impresionarle el cambio de la sihaci6n en e1 tablero de tal suerte que perdió la partida. D5C
A X
T2A
El amenazador movimiento D5T resulta imaginario debido a Xa respuesta R2A!, y t?X peón 2T es invulnerable a consecuencia de i a jugada TlT!
Las negras han tomado la iniciativa y amenazan ganar con el s f t o de caballo y jaque a la descubierta. Si 23. D XP+, sucede 23. .. ., RZA, Esto es un instructivo ejemnlo de peligro imaginario.
da la defensa de su rey. Las blancas juegan y deben decidir si han de continuar el ataque. Lo continuaron por medio de este prometedor sacrificio dc piezas: 14. CXPT 15. A X C + 16. D5T-t-
C1A X C RXA RXC
Los tres primeros movimientos han sido forzados; pero el cuarto es un error grave. El iinico medio para salvarse consiste en restituir los sacrificios a su adversario, o sea 17. ..., AXC; 18, P X A , CXP! Si 1 s blancas no toman d caballo, sino que prosiguen el ataque con 19. T3T, entonces 19. ...,H A ! (pero no 19. ..., C3C; 20. DYTC, RXA: 21. X)8T+, C x D; 2 2 TxC, mate).
T2D A5D AXA
Colle-SuXtankf Weja, 1.930
R2A
wer diagrama n h . 94)
R xa
AXT
negras están un poco atenazadas; mas parece que tienen assgura-
Y las blancas abandonaron.
Las negras se rindieron, porque el mate es inevitable después de 20. ..., PXA; ZX. C6C4,etcetera,
en el fragor de la lucha. Y cseo ya medio de defensa.
Este peón libre recogi6 ei fruto de la bien elaborada defcnsa de ias
es un
23, A X A
PxA
24. D5T 25. T4A 26. TQT
RlT TER
27, C4X)
TX D2R
28. C2R 29. C4A
R1C
1
t
negras.
36. A X P
dad su quebrantada pasicidn. Ahora amenazaba la maniobra P4CR-T3T y, fuego, Ia rombinacibn D x P + , T X T T8T 4- y mate dentro de una
+,
...
34. T2A 35. T2A 36. D4A
37. D6T 38. DQA
T4CXC TIAD
D4R
D2R D4R
Y tabhs por repetición de mavirnicntos. El ataque ha sido rechazado. LQu6 nos enseña este ejemplo? ¿Corno es posible que las blancas no hayan podido realizar su pxepoaderancia si Xas negras casi no p d a n defenderse? Esta se debe a que ellas se han encontrado ante un movimiento que no esperaban. De esto se deduce que, en una mla situacibn, es necesario adoptar un medio de defcnsa que psicolbgica y artfsticamen- plantee al adversario problemas dificiles,
llil~lt t t '
...
Esfc sacrificio tia sido inoportuno y conduce s6lo a un empate. Por i o visto, Ins blancas han suerido castigar a su oponente por la toma del peón ST.
jugada.
33.
ti?
fendido bicn, no cihst;ititv Irn tlifiiqiil tades, y no debían haber ricrtiido sii vatioso tiempo poniendo i a torre cii movimiento por un peSn. Era necesario jumr 35, ..., TlCR para coniinuar la defensa.
Las negras dcfieaden con tenaci-
Verdaderamente, las blancas han perdido e l acampisb, por lo que las negras pueden eludir la derrota.
hlh 'LXP
I?t;islii ;iquf 1;)s rirXt.itu
Diagrama núm. 98
cm
Era mejor 32. B3'f!, y, despds, TK.
14. D4A 15. 'rw:
Esta pasici6n. es similar a Xa refiejadsl en el diagrama n h 36. Es conveniente oberpar la cautelosa defensa de Xas negras: no tienen ningún punto vulnerable y su rey se enicuentra en el sitio donde acontece la lucha. E1 plan efectivo de juego de las blarrcas estribe en situar el rey en la casilla 3D y preparar la ruptura de peones del adversaria por medio de los movimienres P2-3A y P3-4R. Mas decidieron actuar sin Ia ayuda del rey y empezaron la cautivadora ruptura en el flanco de la dama,
27. P6T 28. P X P +
PXP
29, T5T 30. T x T + Z
TXP
36. ... 37. T 8 A + 38. TXB+ 39. DJC+ 40. T8C
BXA
RZC RXT R1T
Son tablas, porque 40. .. ., TZC; 41, TBT+, T2T; 42. TIC, etcCEera.
El flanco del rey de las negras es vulnerable, y las blanca tienen mucha movilidad. La partida prosiguió así:
Oiivern-Vera Menehik Montevideo, 1939 Diugranin n h . 100
Aceptar este sacrificio es muy peligroso: a 29. ..., AXT; 30. P X A , R2T sucede 31. D5R v la amenaza DX PT+.
R3D
...
Como indicaran Wainsteit~y Rngosin entonces, son tablas si hubiesen jugado 30. TALT, T1-3C, 31. R2C, y el avance de tos peones negros qupdaba interceptado.
30. . , . 31, T X P +
RXT
32. T6D 33. TXPD
TXTD!
RXt P4TDI
Las negras se defienden efectuando movimientos precisos. No se puede 31. ..., A X T ; 32. D X A - t . , R2T (O 12. . .., RIC; 33. Ax.Ptl; 33. T5C y las blancas ganan por amenazar con T X P T + , 32. ASADI 33. A X A
RlTl
DXA
&te cambio de alfiles debilita aún mis la posicibn del rey.
1 , s negras XXtvan una p i c a y dos peones de ventaja, y las blancas atzican y amenazan can 28, TXC-F! y 29, T7R-I-.
1
1.a ajijedrecista Alenchik jug6:
Así evitaron 1a combinacidn arriba citada, pues a 29. T x C + sucede 29. ..., T x T. Pero, según Alekhine, las blancas godian ganar si continuaban 29. A9C1, A X A ; 30. TRXP, ATA+; 31. T X A , P X T 5 . ; 32. R3T, y las negras no tienen defensi ni pucden dar jaque, Tras esto, hay que reconocer que 23. ..., D7A+ fue errdnso, Mas podían defenderse satisfactoriamente j u g ti n d a 27. ..., A5T-k; 28. R2C, D?D+: 29. R3T, X ) X F + ; 30. R X A , LIJA+ y 31. ...,
cucncia del rey descubierto y del
Pera la cautivadora combinaci6n
24. D8R-f-, RIA; 25, T4AD, A4A; 2 á TIR, el maestro Milcenas tetifa
preparado el movimiento 26, ..., DQDIseguido de B3CD y DxP7A o T X P7A.
2:
por ella, cl caballo no puede sítii:irse en ningiino d e los dos puntos de referencia. 14. A3R 15. C3C
f& D4-r 17. C X P 18. D X A 19, A X P
C2D P4T D X PA A X C!
PXP D3 A
Tras esto, las negras Tienen una pu~ici6nsatisfactoria,
Y las negras ganaron.
DXT.
La partida prosigui6 sisi: 29. R3TI 30. T X C 6 31. AXP-f32. T X A
Dingrnrnu núm. 103
Gorki, 1946
R IA TXT
Diagruma núm. 102
TU:
T71? criri j:irlrtc
rlt' rlkitit.i, Llitiiliir
trrr
cede 4. ..., I>4Ii). 3, ...
<:'t$)!
:Vaya sorpresa des;igrr~d,ilildl i c , negras se defienden y alacan sirntiltáneamente: si 4. Li X C?, sucedc 4. . .., D X P + y mate en dos jugadas.
DXC
4. T2R
5- T5A 6. TSR
TITII) D2AR! De nuevo. amenaZin con mate, libran a su caballo de fa trabadura y mantienen la ventaja de una pieza. Aqui. las blancas muerden el polvo de-la- derrota, ,por no h a h r calculado las posibilrditdes de defensa de su adversario.
Ksres-Smyslov Moscú, 1947
D7C -t-
H las blancas abandonaran.
El bando blanco ocupa una pwiciBn activa, y el negro ha evolucio-
A l parecer, las negras se encuentran en una situaci6n de peligro y sus printas 3D y 3AR son vuinenblcs. Et caballo blanco puede ocupar uno de los dos, mediante ei salto 3C-4R, lo cual serk un buen apoyo para irne acci6n ofensiva. Las negras jugaron:
Las blancas tienen das jicones por alfil; pero esta insuficiencia sc compensa con la vulnerabilidad de la posicibn de su adversaria n conse-
13.
. ..
nado satisfactoriamente y esti disDueSf0 para el combate. Las blancas realizaron una combinaciSn, que fue desbaratada por la ingeniosa detensa de su artvcrsario. I. CW? 2. T X P
3. C X A A3A
De esta manera, resueiven el problema fundamental de Isi defensa;
PXC
D2AR
...
Al oarcccr. han ganado una pieza desp& de haber tomado el prOn negro, puesto que a 3. ..., D X C sigue 4. T X C + (pero no 4. T6C o
La posición del rey negro es vulnerable. Las blancas han de mover. por b que pueden si.tuar el cabaIla en et, importante punto 6D. Las ncSras habrán da sortear muchos 0%aculas para, defenderse. La pafiidsi prosiguió s i : l#. C5C
TIA
-.
.+ -.--.-A-A-.-A-.-
--."
NO se puede jugar III, ..., A3T, por 13. T7A; las negras deben evitar que Xa torre del oponentc se adentre
>.
,/
ea sus Xnctzs,
19. C6D!
.
De~gigi.unr«iaúnz. 105
a
,..
,
Lris blancas plantean un serio prohlerna a su adversario. El r n ~ v i m i e ~ 19. C x p era menos eficaz, pues sucedía 19. ..., T X T ; 20, TxT, A3T; 21. P3TD, TZA y las negras podían mejorar un poco su situación, 19. ...
TXT
21, PBTR 22, PST
A3T
a.T X T
...
23. F3T
30m
32. R2A
DSTf
...
DXD+ A5R k
1
AXT
P5X1 AXP+
Y empate por jaque continuo. =te caso de defensa y ataque si-
multanco se ofrece a menudo ceründo la contienda adquiere un carácter violento en el tablero de ajedrez. Taimnnav-Schambvich
...
~ x n
22. T x a 23, fsT
23.
j
T3C .-.
...
S,T4T 25. P3C 26. E A 27, T X l l T
N. X X T
Díugrma ndm. 107
31, PIT
R2R TX)XCR AXD
PXP TXT R2A A38 T3TR
1
Y empate. ljnvski-ijim;iguia
M O S C ~1958 ,
Simnguin-Aronin
Moscú, 1947
D i a g m a nJm. 108
ilitagr1pma naini, 106
DgR -1b5T-f-
Y empate por repetición de movimientas. Smyslov sr; defcndi6 con habilidad y pudo salir iro oso de su situactdn dificil.
No es fácil valorar esta complicad a posición. Las blancas prepararon la ofensiva cn el. Planco'de la dama, y las negras abrieron una vertical para atacar al rey de su adversario y su amenaza DTT es bastante in-
Lifienthaf-Tolosch Piarnu, 1947 (Ver diagrama nirm. 105)
Las negras tienen irna calidad d e menos y su rey está seriamente amenazado; d plan de defensa estriba en una serle de interesantes y aieccionadores motivos combinatorios. 28. ...
29. D X A
72
A8C 4- I WR-1-
1 Aproliechando 12 oporxunidad pau ra una coxnbinaciSn iaue brin(fat>ü la desafortunada situacion de la darna negra, las hbncas jugaron:
quietadora. Pero Taimanov h m a medídas defensivas a su debido tiempo. 17. T3T 1%.C X C 19. A X C
20. ñ)3C 21. D3T
D5T
TXC
PAXA A2D
...
11
Las negras amenazaban atücar en el Banca de la dama con P4T. Los peones del adversario inmovifizados son a menudo un medio para deknderse.
29. A4A 30. R2A
l
C3AI
21.
Kiev, 1954
El ataque fue rechazado y las respcctivíts pmiciones son equivalentes. La partida finalizó en tablas.
Amenazan con tontar ef peón 4D. 24. T X C 25. R2T
D2C
31b
EI gedn atacante 5T e$tA trabado. A 23. T7A *gula el jaque continilo con D8R-ST-8R, 23, ...
l
...
adversario, 22,
23, D X D
D2R
Prosiguen el ataque sin tener cn cuenta. los recursos defensivos de1
Aqul parece que I~tsnegras pie*a consecuencia de la 23. A6A mate. pero kailanñ un movimiento defensivo Único que se basa wbre una deficiencia cn la posición del rey blanco.
Idas medidas defensivas tlr r c l r rencia conslituyeron el wml,io (le las piezas atacantcs,
Las blancas habian ganado si en lugar de 39. A X PAR (Rabia doblaje de peones en dicho escaquc) hubáesea jugado 39. D8T+, TLC; 40. P7C+, R2A; 41. DE;T+-, BXP; 42. 73
T X + , RlA; 43. D6T+, RZA; 44. 29, .., T3T D7T+ y mate dentro dc una jugada. 30. TLA Con todo, las negras no parccen estar en mejor situación ahora, pues Porque amenazaban con 30 ..., a 39. ..., P X A sucede 40. D8T+., a lo que sigue ahora 11. R2R (40. ..., TIC: 41. DXP-t-1: 4%. 1 A x P y el peán 2T esta defendido T2R-f- y las blancas ganan. Sin em- por la torre, Tarnp~coofrece nada hirgo, Ias negras se defendieron con iniportaatc 30. ..., C3A, por 31. serenidad: AXP. 4 . .
pf,
40. A X T + 41, D4A 42, D x PA
DXA
RXK
30. ...
Con obietu de comer el pc6n 4R. Pcro la r c s p u ~ mfue: 31. T3A
Folugaievski~Ebtni Maria~skc-lazne,1959 Diagrama num. 109
Al no hallar una sucesibn de moví=ientos conveniente, bs negras
perdieron la partida. Taht-Kerw
Moscii, 1959 L)iagrama nzim. I X Q
eficiente evofucidn de sus piezas que facilita una rápida concentración de fuerza para su defensa. 15.
...
16, C5R 17. D3T
RXC TXT T2T
Las negras efect6an jugzdas car e n t a de aest6ticar; pero merece la pena hacerlas con ral de mantener la ventaja materiat.
Tras el sacrificio del caballo, las blancas hacen movimientos con los peones; Esto significa que disminuye el rima de su ataque.
...
18, 19, TDXD 20, A2W 21, A3A 22. T3R 23. T3C+
La
sitriacibrl an criiitirridniil~Iuir
ambos bandw.. 1 , ; ~bt:in{:rra nri t~trtlnta en wnsideracibn e i coirlriijrrrgti rln SU oponcntc y se disprincn n ctiiiii!ii, zar una gcligmsisima ofcnsivcr con cl pe6n CR, Por lo mísmo, b siguiente operaciSn realizada por las negras dehii6 de apoyarse sobre la hase de una valoración exacta de las posibifidades: de d e f e n S a de su rey.
Tras esto, se ve que 21. ..., C XC; P X C,A x f significada la dexrota, porque 23. P6A. 22,
CIA TDlD DJC RXC
C1R CZC
Las negras desbarataron poco zt poco 1% intentos de ataque de SU adversario y alcanzaron la victoria.
Psrm, 1960
Esta ofensiva esta justificada, puec las negras no pueden aprovecharse de1 debifitamiento de ta pai~56ndel rey blanco por faltarla el alAl de cñsilias blancas. Sin embargo, operan activamente en el centro.
25, A X C 27. T X T + 28. P6A
I XA TXT
...
Se ha Hegada al. momento critinr, Ei seguro juega del gran maestro I'ahanov muestra que calcul6 con precisibn sus recursos defensivos.
Las blancas llevan un pe6n de ventaja, pero SU rey se halla en una situacibn cn'tim. Las negras dekfan haber apoyado su ataque con el moEn esta posíci6n, Tahl sacrificic6 vimiento 29. ..., P3T y, si 3Q. T X TI, inesperadamente un caballo: JO. ..., C K + f y ¡as blancas no pufden defenderse. Despub de 29. ..., 15. CxPCf? ... P3T, las negras amenazaban can cambiar la torre 1C y hacer evoiuSirr calcular ccn precisión todas €ionar la otra torre a Ia casilla 3CR. las prr>bahiIidades, estos audaws saPero cl maestro checosiovaco no crificios suelen ser muy peiigmsos. advirti6 esta posibilidad e hizo el Las negras compensan- e1 debilitamovimiento: miento del flanco de su rey con pxzia
28. ... 29. P X P 36. RXT Jf. TIA
PXP A4AJ TlCR WBDI
Estu EX una buena r&piicrt, táctica me rechaza definitivamente h arnenaxa de las blancas. 32. TXB
...
No se prredc 32. T x A, D8ñB3, añ 32. A X A , P5R+*
i 1
l
32. ... 33. D6T 34. D3T
25. ... 26. R3C
B6D T3C A5D T XC
3% D8A-b 35, D3T
~ x r
37. TlCB 3% R X T 39, DIA
TxT+ D8D-i-
40. D2A 4 t RIA
A6A
1
D6A
Y las Mancas se rindieron,
S~liítrnE;ovi~h-K~mcbnoi hningrado, 1968 Diagrama n h . 112
D3A D5T
+
Con 28. ..., MT1-, las negras cmAiitrs l pezamn un at;wjue peligroso contra C el rey de su a&remrio. Hay dos pzj- H sibles resguer;tas: 29, RIA, C X P R ; el 30. AXC, T X A o 30, CXC, mientos. T4TxC; 31. C6A+, AXC; 32. Mnxey-PiivXen ko T x T+, BZC no es aceptable, y $0. T x C , T X T ; 31. AXT, TXC+; 32. Masce, 1961 AXT, A?T que, aunque relativamente mejor, brhda a las b h n m un Diagrama núm. 114 final poco prometedor. S t a h l h q optó par una respuesta mejor.
Las negras buswn incansablerncn-
te nuevas posibilidades. Como suela suceder en casos mi, la defensa tenaz del que se encuentra en una
situaci6n dificil causa efectos psicoldgicos al atacante, Aqui debfan las blancas jugar 27. D2Dl; mas sacrifican innecrsarlaente un peón. 27* X. 29. JD.
P6A-b DXPC RXT
B3Et 31. BJD?
PXP T6A.f-1 DxT+ D8A 1-
29. 'R2A
...
Esto es 61.principio de una interesante camlrinacián que obliga a las 'blancas ri defenderse con mcrvimien-
Este movimiento puede s e r la a y s a de la derrota; 31. R3A era
tos
rnelor,
3%.... 32. RJR 33. I)ZC 34. M C + 35, D X T
31, T X T + 32, DIR
BxA RXC
22, ... 23. R X A 24. T x C
..,
La serie de movimientos 24. RIT?, D3A-t.; 211. TJA, C7R no es con~,e. niente a las blancas.
24.
...
25. T1D
TxT
...
Segiin Liiientha1, 25. DZD! era mis contundente,
76
CXT
C2C
Segdn el gran maestro movimiento 34, ::., W D + de tenerse en cuenta. decir, sin embargo, que el
Diagrama ntlrn. 113
, b q u i no carece de interh. 1
AXP-t-I C5A 4-
A3T
El caballo se pone en movimiento amenazando el peón 5A. No tenia sentida recuperar Ia calidad mificadñ, mediante 32, ..., A X T, ,porque 33. DXC y las blancas se! libraDespués de $0. . , ., DIT, parece ban det. peligro. que las blancas deben rendirse ante la amcnaza de mate. pero la partida 33. DLT D5A prosigui6 s i: 34, TlR CXP
D&C7-
StIitifkrg.X(eres Partida por telegrafo, 1960
lidad:
forzados.
30. P X T
D8C -t D3CRI
'l las negras ganaron este final de damas, Esto es un interesante ejemplo como estudio de psicobgia en la Iucha ajedrccista.
Después de 22. AX A2R, la sitascidn de las negras parece crítica. Pero el hiibii maestra de la defensa activa halla una interesante posibí-
TXC
35. D3T 36. T4B
Kcres, el era digno necesario efectuado
R1A
81. D X P + 82. T7C-b 83. V A S -
de sahaci6n cn que sc aprovecha la posibilidad táctica.
... Veresov-Snetin Novgorod, 1961
Luego de una serie de movimien-
(Ver diagrdma núm. 115)
rancia material,
...
37. A4C 38, A3A 39, A K 40. A3A
RIA
Y ta Mancas consiguieron el mpatc. Esto cs uno de tos cjemphs
tas defensivos las blancas dan movilidad a su torre y parece como si pusiesen de manifiesto su preponde-
35.
RXD
D4C C2R C4A
El eficaz movimiento dc ataque 15. C5DI puso a las negras en un aprieta. Tras un protangado examen. de la situacidn, se cuntestk
C2R C4A
15,
..,
AXC
-_
"
24. A5A 25. T i D 26. T3AR 27. A I C 28. D4R 24. A3C 30, A X C
T2AD P3T C4D CSA
P4C
t
. ~i ~ B.~n t q , IBTA y ha ~~IWIILM 1. IbXl', ( 1 X Ar & I ) M l'A i
,
iii,tiP r i
<:al,t iiiiiiivi'ii, an rwi.lr,irn c l ntaqiic. Si 2. t : X t : , I ) K t : i I I , DXD, A X D + ; 4. Hl'i', ATA, Irid zicgras mm~nticncnka vcrtl;iiu, $riii'iliirL a 5, A X P X ? sucede Ei* ..., 'l'l<:R.
HI1) y,
Luego, prosigul6:
U3AU
(It.
2.AxPCD
Y se convino en que eran tal>!as.
Llepioschkia-Liirblinski
-"-
las negras ganaron. Este ejemplo muestra cómo la subestimacidn, de los recursos concretos de la defensa y la. sobrecstimacian de las aconsideracianes generalesa pueden ser la causa de la
...
De este modo, recuperan el wcin; pero pierden ef r i t m del atzque y cacn ea Is ciavada: 2.
...
J. C4E)
derrota.
4. 'FIDXR
D3C CJT
...
Con ello, intentan mantener Ia iniciativa a toda capa.
La decisidn de aceptar cste sacrificio fue debido a no tener asegura-
4.
da iaa posicí6n del rey. ¡A Jas negras no les h M a sido posible efectuar d enroguef 15. ...,P X C ; 16. P X P + ,
P4R
zan.
Este momentáneo sacrificio plantea nuevas problemas a las negras, Sin embargo, Sueein contin.úa deienditndose heroicamente. 19.
...
20. P x P 21. P X C
PXC BIT A5DI
El aiaque pierde efícacia. La par$ida finaiiiz4 zlsf: 22. T3T 23. AZA
TDXD TXP
7. T X l
RXA Añ A AxC+
8. A X A
DXA+
5, A X P + 6. X3Xf-i-
0-0
IEsto es un eslabón Importante de la ddensa de las negrasi Aunque habrdn de luchar tenazmente por sortear los peligros que les amena-
A4A
Las blancas no pueden eludir la perdida material; por ello, ponen todos los medios para hacer que cambie el e u ~ ode los aconwrmicntos.
RXA; 19. PtD, T1R; 18. A7R-I- hubiese tenido repercusiones graves para Ias negras. 16. P X A l7. A4TR
...
1 2 s negras ganaron.
Las blancas tienea un pe6n de menos, aunque =eran obtener preponderancia con el siguiente sacrificio del alfi1, contando can que Xa mayor parte de las piezas de su adversaria cstdn situadas en cX otro flanco. 26. AXPT 27. D X P +
28. Drn+ 29. C5A 30. D X P
PXA
a ic
AlA D2A
...
Esta serie de movimientos ha msado una sisXtuaci6n favorable a las blancas con lo que, d parecer, han wmpensado la pieza sacrificrtda. Pero el experto maestro que jugaba las negras grepard una ristuta respuesta.
Tahl-Geifer Torneo de aspirantes, 1982 (Ver diagrama nPm. 1111) iCon el sacrificio de un pe&n, el bando blanca addantA a su adversaria en la evoluci6n de sus fuazas de tal suerE, que, aunque mto no sucede en el ajedrez, causa inapresi6n de que éste se halla todavía en la apertura y aquel en el medio juegol En situaciones asf, h defensa requiera p ~ c i a i b n ,
@te movimienb as simple, pero muy eficaz. A 2. %?FA sigue 2. ...,
Sobre la posicidn del rey negm cierne un gran peligro y causa impresidn de que se ie va a dar mate dentro de unas jugadas. Pero la realidad es muy distinta. Wmetamente, las negras aprovechan la posibilidad de cambiar Xa torre Manca ID, h cual puede ser una pieza activa en la acci6ri contra ellas.
se
Diagrama ndm. 118
28. AZA
30. 31. 32. 33.
azR AIC D5T
D4T T5C 34, D3C 35. D2C 3 6 PBR 37, M C 38, 83R 39, T5T 40. T x T 41, D4T+ 42, D8D
Y se rindieron a l prever fa continmci6n A2D y D3R dr? su adversario.
Desputs de esta, el peSn 6T sime para fortalecer al rey negro.
12. A5D 13. A X C 14. PQTIE?
P4CD
Las negras eluden 16gicmente el cambia dc damas; esto faciXira a las blancas tomar Ia iniciativa.
Y las negras se rindieron fuego de no haber quedado ni huella de su ataque. Mat E-Gufeld Navosibimk, 1962
Petrosian-FPp Torneo de aspirantes, 1962
Diagrama núm. 120
Diagrama ntlwa. If 9
TIA AXA
...
Continúan desarrollando su pjan sin tener en cuenta el cambio de sitrració~en el tablero. Mientras las negras ya tienen preparada otra asorpresan que rebate el plan estratégico de! b ofensiva de su adversario.
A l parecer, las blancas no babiaa previsto esta posibilidad, la cual no sSfo les fuerza a abandonar el ataque, sino que les hace pasar cimachos apurusn. 16. P X C
17. C3CR 18. D X A
AXP AXP!
...
Pues no se puede efectuar 18,. C X A debido a 18. ., P6CI
..
La variante 20. AXP, P X A; 21, T X P-f- no es realizable, pues el rey se protege con eX pe6n blanco.
18&
19. R X T
TXD+ D1A 4-
20,
DXP
..<
RfC
Las negras ganaron la par~ida,
Este cambio es oportuno; de auevo, desbnrata ei plan de las blancas.
Buturin-Voskapian Moscú, 1962 Diagrama nzína. 121
Con este movimiento se rechaza definitivamente el ataque de las blancas, que, segUn al maestro Miseiev, pueden lograr el empate, meLas negras sacrificaron dos peones diante 25. TXP!, "CXT; %. A X T t , con cl fin de lograr esta aparcnteB x A ; 27. P5A+, RXPT; 28. mente prometedora posiciQn, No D4A+, RX: 29. P X A , D X P ; 30, obsrantc d pefim, la$ blancas juW A y DXPC. garon: En el transcurso de la partida, las negras tomaran poco a paco la iniciativa. De este modo, restituyen un pebn 25. D5T AZA y pierden el enroque, üuntlue esto 26. M T P4AD se compensa can el rechazamiento 27. P3A P5A del ataque de su adversario.
juegan las negras y han de bacer frente al peligroso asalto de peones en >el.flanco de su rey; en una situaci6n asi la defensa pasiva ofrece pocas perspectivas, por b que empiezan a contraatacar:
Este es un inesperado contragol-
pe, cuya base tdctica es la serie Be movimit*ním 12 AXP, CXC; f3. A X A , CXPAR o 12. CXP, C4R; 13. AZB, A x c; 14. C X A, CX PAR!
1. -el.
ARTS DE:
La DFFEASA
En csta prometedora situacibn, las
Mancas debían haber jugado 22, COiC4R con la que amenzzaban ef pe6n 3T can el alfil; pero jugaron 22. CXPR. Las negras pudieron defenderse y demtistrar et error Fe su advmario,
23. A X P
/
TXCf
El aofrecj-mknton de fa posibilidad de defenderse no s61o salve a las negras, sino que les brinda la
24, A3R+
...
O bien 24. P X T, A X P; 25. A3R+,
25. A X T
PXA
27. b x P + 28. D e +
RIC
RXA
Y las negras ganaron. Esto es oOo ejempfo de subestimaci6n de las posibilidades de defensa del oponente,
En d víghsimo movimiento, y con objeto de quebrantas Xa gosicián del rey, las blancas ofrecieron d sacrificio de una tonc al comer en la casilla 5AR; p r o el inesperado contragolpe de su ogonente las desbarat6 el plan. 20. ... 21. I)XP 2 2 DXPD
P3Rl TlTlR TXA
El ataque de las blaricíis he sido rechazado y les amenaza la pérdida material. Los siguientes intentos de hacer variar el cursa dc h contienda por medios ticticos se des~anecen ante et juego preciso de las negras. La partida tcrmin6 asf: 23. CSC+ 24. T X T 25. D3D 26, D3T+ 27. T7A+ 2%. TDlAR 29, P5A 30, RIT 31, T7D
32, D X P 33. D X T
PXC
TXA DXRC AJT RlC DJC-!-
DxP+ D4D
P13C TXP
Diagrma
n h . 122
Las blaricas abandonaron e1 jy~go. PetrosJan-Botvinnik Canponato del Mundo, 1963 (Ver diagrama
40. T X P
T5A
PXP
..-
Y, &, las negras consiguieron dar m& movilidad a sus fuenas, La siguiente jugada pone de manifiesto el propt5sito de proseguir simplificando el juego.
DxT
AIekseiev-Madn
Torneo por currespandencf
38. A3A 39. P X P
nUm. 123)
tunamente movilizar las piezas a costa del sacrificio de un petin.
32. ...
PSAI
33. A X C 34. 8.TBA-I35. A4D 36. T4A
PXC R2A
37.
TXT
TXT
P4C
T5C
...
14. T X A fS. PJCD
AXC
CXPR D4A
Tras haber ganado el pedn, las negras continúan defendikndose de la amenaza 16. AZC.
Varios grandes maestros estimam que 16. A X era más eficaz y hu-,
Con otro cambio, fac negras pudieron empatar en un final de torre y dos peones contra una torre y tres peones, Botvinnlk-Pctxasim Campeonato Elel mundo, 1983
Las negras tienen dificultades en fa defensa por causa de la vulnerabilidad de los peones ,4&, 5TD y 4TR, par lo que decidieron opor-
13.
El. bando negro acosa a). pe6n 5R,
por 10 que ha demorado el daenvoXvimienta de sus fuerzas y esto puede ser el objeto de ataque de sit adversario. Aqui es arriesgado 13. ..., C X PR; 14. A3R, D3D; 15. TRlD, D2A; 16. A4A, P3A; 14. TDXA, e imposible 13. 0-01; 14.
biera planteado un problema diffcii a las negras en orden a su defensa. Sin embarga, la amenaza A3T pa-
rece bastante peligrosa. la. ...
CXA
EI cambia de otra pieza activa da1 oponente es un importante eslaMn en eI dan úefcnsivo de Isis negras.
17. P X C
A2Ib
El propdsito de tas negras va,poniendose de manifiesto: movltzm el afhl con el frn de situar el rey en el escaque 2AR después dcl movimiento PJAR.
...,
CZA. Primeramente eliminan el cabalIo, que amenaza con tomar parte en la Incha.
Esta casilla es una buena posicidn para la dama, y ia situecihn de Izia
I
negras va mejorando en el transcurso de h contienda.
19. T21)
Diagrama núm, 125
AJA
' r ~ l ~ ~e1l ~i,t*'Il% l r Ti' ftet~rlhp * t i # ~ ~ ~ l # La idea del sacrificio del pc6n cs~ ~i* tribaba en la irrupción de C ~ i i i ser i ; i ciiiiuii rio tir i f t t ~ h dIJL ii!anr;ir;, piics niii.riltii 44. , t'BR1 i torre.
1
30. ...
Entranan peligro 19, ..., O -0; 20. A6D y 19. .. ., AXPT; 20. $R, .AJA., 21. D6C.
TIA
Según el ex campcdn del mundo
M. Tahl, las blancas polXian todavia
crear ciertas dificultades a su adversario, mediante 31. T5R. Pero jugaron 31. TIT, y h s negras sin dilaciBn gobernaron su nave hacia el puerto de las tabkas siguiendo el rumbo 31, ..., C2R; 32. TXT-F, R X T ; 33. T XP, T7D; 34. TXPT, T x C; 35. T8T+, CIA. Lo cual termind en empate.
iEc necesario prevenirse! 20. ..., P3A? cs prematuro, porque sucede 2'1. P4C!, el cual es mis eficaz que 21. D X P+. Se h b r i 0bSe~adoque
las blancas no logran sacar ventaja Xea l lentitud, con eue IBS negras hacen evolucionar sus fuerza luego de haberse efectuado el cambio de las piezas menores.
de
eludir-todo cambio; pero sc vc c~iic Botvinnik calcuIB del?idamente este
finel.
47. RXC
T7A!
Esto es el quid del plan de las negras: la situación de Ie torre es tan oportuna que impide la realizacibn de la ventaja material de las Mancas.
Campeonato da1 Mundo, 1963
Con este movimiento se culmina la redizacibn de una defensa me% dica; las negras restituven d peSn.
j&to es Xa defensa activa! L a torre causa impresi6n en la segunda bnri-
Diagrama núm. 126
zontal, Ahora, cl movimiento 26,
CSC no seria m& que una salva, por Ia repuesta 26, ., D X D y porque la torre ya no estj en la casiIIa 2A.
22 ...
a.T X D + 24, T7Rf
axa R2A
R3C
L a partida termin6 en tablas. lotvionik-Petrrisian Tamgeanato del Mundo, 1963
Las Mancas están mejor dipues-
coa SU vigksimo quinto movi* miento D4A han creado Ia amenaza tActica C6C, cuya realizrici6n -tras el. cambio de damas en el escaque 4ARr e f o n d a sensiblemente Xa prmi6n en los peones 4D y 3CD de su oponente,Las negr,ras contestaron:
T7A T7TD TbT
T7T i. T6T P5T TXP
Empate. Y no 26. ..., D X R 27+ CxxD, pues el cabal10 g el pebn 3C yuedarían a merced del ataque de las torres del oponente, Esta simple ratirada de la dama permite a las negras efudir los peligros al paso que tienden una hibil celada a su adversario. VeAmosla: la cautivadora contiriuaci6n 27. C4C, T5A; 28. D5R? causa i n ~ 5 ~ e r a h e n at e blancas la derrota: por 28. ..., TXCI; 29. T X T, C3AD.
(Ver diagrama núm. 125) ~ B S y
TJAB
P4T T4A R2A
53. R1R 54. T5A 55. P X P
..
Las blancas recuperan el peSn, dado que no tienen ninguna posibilidad de ataque y que su adversario intenta consolidar su pnsiciSn situando el rey en el escaque ZAR.
49. 50. 5'L, 52,
Las negras estha bien situadas y no tienen inconveniente en cambiar las damas. 28. DXD P5T
29,
30, T8C
TXD PXP ...
Batvinnibr-Petrmian.
Campeonato del Mundo, 1963
Las negras tienen un peón de menos; pero suplen esta deficiencia por una movilidad de sus fuerzas superior a la de las de su adversario; movilidad que les permite defenderse y hasta crear momentos interesan te%
Las piezas blancas apuntan a la sus píews estan dispuectas, decacerfortaleza dd rey negro. Con el mo- tadamente. La partida cantinu6 de vimiento 19. D3T y, luego, TIR y esta manera: CXPA han creado una seria amenaza. La respuesta de las negras es modela de una defensa audaz/ y precisa, í No cabe duda que es la defensa mejor; con el ataque contra el p e ~ n SR, termina ia cvolucibn . de sus piezas, Para el movimiento 20. TIR, las negras tenian dispuesto el M, ..., 18. A X C DxA D X P; 21. CXPA, D5CRIi con lo 19. D4T R IC que las piezas Mancas penden'an de 20. C5C ... un ahilos. Por otra. parte, el rnovid miento que han efectuado parece Este salto de caballo parece muy indicar los puntos débiles en isi po- efectivo, pues aclda sohe dos peocici6n de su contrinmte; esto es, nes importantes. Pero la respuesta los pwnes 4D y 2CD. de las ncgras indica que estan dispuestas parü rechazar este ataque. 20, C X C
21. C2R
TxC D'IC
Loc dos maestros convinieron en que eran tablas.
Diagrama núm. 128
20.
...
~ 4 r n
21. C X P
TX AR
Can lo que restituyen el peón de ventaja y mwilizan sus fuerzas para la defensa. Las blancas intentan otra vez reanudar su ataque.
..
Es pelig~OS0 22. ., TXC; 23. T X T , R X T ; 24, TIAI-, R1C; 25. A x A o 23. A X A ; 24. T6A. Despues de este efectiva mavimiento de defensa y de ataque de las
..,,
negras no suc&errln lw rnovhisntos 23, DYR, T2D o 23. D5C, TSCR! 23. D2A 24. A X A 25. A6A
D3R TXC
C4D
También el caballa se pone en movimiento.
Después de 17. D18, las blancas amenazan con C6C o D4T. La3 negras llevan un pe6n de ventaja, pera
Se acord6 dejarlo en empate, porque se hubiesen producido la serie de movimientos forzados 27. DXP, T7D; B. ASC, T X P+; 29. R X T , DSC-F.
I 2 3
4 3 6 7 8
9
Finales de peones. - l . Maizelis. Finales de alfil y de cabalio. Averhach. Teoría ds finales de torre. -- Loweriiish y Smyslov. Teorra de aperturas. tomo t: Abiertas. V . N Panov. Teorla de aperturas. tomo $1: Cerradas. ,,,,, V. N Panav. Deiensa india de rey. P. Cherta. Táctica moderna en ajedrez, tomo 1. .- C. Pachman. Táctica morfern? en ajedrez, tomo ll. L. Packn,tan. Estrategia moderna en ajedrez. -- 1-udek Paciiman.
La trampa en \a apertura. 8 . Werristein. Aperturas abiertas. - L. Packmarr. , Aperturas semiabiertas. - L. Paclir,rian. 13 Garnbito de dama. - Ltidek Packrnün. t 4 Aperturas cerradas. - l..udek Pachnian. 15 Ei arte del sacrificio en ajedrez. -- - R. cipielii~arin. 16 Como debe jugarse ia apertura. . - A . S~ierin. 17 Teoria de los finales de partida. - .- Y Averkiich. 18 El arte de fa defensa. ilia Kari 19 Tactica del medio juego. - t . Bondarewsky 20 La ectructrira de peones centrales. - - B . Persitc. 21 Ea perfeccibn an el ajedrez. Fred Reinfcld. 22 Ei gambito de rey. - Paul Keres. 23 Lecturas de ajedrez. -, Yuri Averbach. 24 200 celadas de apertura. - Emil Gelenczei. 25 Defensa sicíliana. Variante Najdorf.-,,,-P. Chcr,ta. 26 Ajedrez de entrenamiento. - A. Koblenz. 27 Jaque mate. -- Kurt Ricktcr. 28 Combinaciones en el medio juego. P . A. Rotnanuwsky . 29 La defensa Firc. ,- G. Fridshtein. 30 El sentida curnUn en ajedrez. - E . L.asker. 31 Ajedrez elemental. V. N. Pariov. 32 La defensa catalana. Neiistadt. 33 El ataque y la defensa. .- Hans MüHer. 34 Defensa siciliana. Variante Pauisen. - P. Ckertii. tO 31